Una chica estadounidense, Rosey Blair, y su novio estaban camino a su casa en Dallas pero, desafortunadamente, sus asientos no estaban uno al lado del otro. Rosey le pidió a una chica que viajaba sola si podía cambiarle el asiento y agregó que la persona a su lado podría convertirse en el amor de su vida. En ese momento, nadie hubiera pensado que las palabras de Rosey se volverían realidad, según sq.
Después de que Rosey cambió su asiento con la otra chica, notó que ella y su nuevo compañero no paraban de hablar. Como se suponía que el vuelo sería largo y aburrido, Rosey comenzó a escuchar lo que decían. La conversación que escuchó la hizo comenzar a transmitir todo lo que sucedía a su cuenta de Twitter: tenía una hora de Wi-Fi gratis.
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“Nosotros no estábamos sentados el uno al lado del otro, así que les preguntamos a nuestros compañeros de asiento si podíamos cambiar de lugares, y ahora están ¡¡¡COQUETEANDO!!! Ambos se ven sensuales, están hablando y hablando, se sonríen, y ni siquiera hemos salido de la pista. ¡Espero que se enamoren!”.