Llegó el verano y las tan ansiadas vacaciones. Si estás planeando un viaje a Escocia, aquí te ofrecemos nueve razones para que no lo dudes a la hora de decidirte. ¡Buen viaje!
1. EXPLORE UN CASTILLO
En Escocia tenemos muchísimos castillos. Muchísimos y muchísimos castillos. Tenemos castillos grandes que se alzan en medio de la ciudad y también otros pequeños que se desmoronan al borde de los acantilados. Y todos y cada uno de ellos son dignos de contemplar.
Visite uno de nuestros icónicos castillos, como los de Edimburgo, Stirling o Eilean Donan, o algún otro de entre los más memorables, como Dunnottar, Glamis o Caerlaverock.
2. DISFRUTE DE UN «CEILIDH»
Los ceilidhs son una forma estupenda de celebrar todos los elementos de nuestra cultura – nuestra música, nuestra danza, nuestra gastronomía y nuestro espíritu acogedor – en un ambiente vertiginoso de risas y diversión. Todos son bienvenidos. No es necesario que conozca nuestras danzas. ¡Antes de lanzarle a la pista le enseñaremos primero los pasos!
Los ceilidhs tienen lugar en todas partes del país. A veces forman parte de un festival más grande y otras son tan solo una celebración de una noche, ¡pero una noche estupenda!
3. PARTICIPE EN UN EVENTO
Tenemos literalmente miles de eventos, pero para gozar de verdad de unas vacaciones perfectas en Escocia, busque uno con esencia escocesa de verdad. En verano puede acudir e incluso participar en uno de nuestros Juegos de las Highlands, un increíble espectáculo de música y baile. ¡Pero donde también se compite reñidamente!
O pruebe a asistir a uno de nuestros festivales de fuego en los meses de invierno. Shetland celebra su historia en enero con el desfile vikingo de Up Helly Aa. Durante la celebración de fin de año de Hogmanay se hacen fogatas al aire libre y todo esto sin olvidarnos del Festival de bolas de fuego de Stonehaven en el que los participantes hacen girar enormes bolas en llamas antes de lanzarlas al río.
4. MIRE AL CIELO
Sabemos que nuestros paisajes son impresionantes, como también lo son nuestros bosques, montañas, ríos y ciudades, ¡pero no debe olvidarse de mirar también hacia arriba!
Durante los meses de invierno es posible ver en Escocia la Aurora boreal, el espectacular fenómeno en el que haces de luz de color verde, morado, rosa y azul cruzan el cielo. Tendrá más posibilidades de verlas si viaja hacia el norte, pero en ocasiones, si las condiciones meteorológicas son las adecuadas, pueden observarse desde cualquier punto de Escocia.
Y si está usted recorriendo el campo escocés, también podrá disfrutar de la sobrecogedora visión de una noche estrellada. Tenemos nuestra propia reserva de cielo estrellado y muchísimos lugares de cielo oscuro en los que, gracias a la ausencia de contaminación lumínica, es posible contemplar, a simple vista y sin ningún tipo de lente o telescopio, hasta 7000 estrellas.
5. MÓJESE
¡Y no solo cuando llueva! Escocia ofrece una enorme variedad de deportes acuáticos (y además si ya se ha mojado usted con la lluvia, más vale disfrutar en el agua, ¿no?). Desde practicar el surf en playas de primera categoría hasta hacer submarinismo para explorar restos de naufragios, hay muchísimo donde elegir. Y nuestros ríos son el sitio perfecto donde realizar una amplia gama de deportes, desde kayak y barranquismo hasta tubing o river-bug (en los que se desciende río abajo en una rueda de goma inflable, en el caso de tubing, o en una barca-asiento inflable en el caso del river-bug).
6. VIAJE AL PASADO
Por mucho que nos guste la música moderna, las compras y el estilo de vida actual, somos un país que sigue celebrando sus raíces. Tanto si quiere usted investigar si su árbol genealógico tiene alguna rama en Escocia, como si quiere ver cómo vivían nuestros antepasados o simplemente descubrir más sobre la historia de Escocia, contamos con una enorme oferta que le deslumbrará.
Retroceda en el tiempo en uno de nuestros importantes museos. El Museo Nacional de Escocia, en Edimburgo, tiene cientos de artefactos en sus exposiciones. O visite las casas y edificios donde vivíamos en el pasado. Tanto las Piedras de Callanish en las Hébridas Exteriores como el Núcleo neolítico de las Orcadas tienen ambos 5000 años de antigüedad.
7. SABOREE UNA BUENA COMIDA
La gastronomía escocesa no se queda solo en el haggis. Y no es que el haggis no sea delicioso, pero nuestra comida y bebida tiene mucho más que ofrecer.
Podemos sugerirle cenar en algunos restaurantes increíbles galardonados con estrellas Michelin. O que coma pescado y patatas fritas, el famoso fish and chips, al lado del mar. O que cate cientos de deliciosas muestras de alimentos en nuestros mercados y ferias.
Tanto si compra nuestros productos para cocinar usted mismo como si deja que sean nuestros chefs los que le elaboren deliciosos platos, es difícil pensar en algo que no sea posible cocinar aquí. Y muchos de nuestros productos son exclusivos de nuestra tierra: nuestro cordero alimentado con algas marinas, o nuestra carne de vaca de la raza Aberdeen Angus. Y sin olvidarnos, por supuesto, de nuestro whisky.
8. HAGA NUEVOS AMIGOS
Además de nuestra acogedora gente, hay otro tipo de amigos a los que le gustará conocer. Nuestros animales silvestres le esperan en todas partes, tanto en el campo como en atracciones. Conozca a nuestros famosos pandas gigantes en el Zoo de Edimburgo, o diríjase al Parque Nacional de Cairngorms que alberga el 25 % de nuestra fauna silvestre más escasa y amenazada.
Vea a los animales de cerca mediante cámaras de CCTV o visite una de nuestras atracciones donde podrá aprender más sobre ellos.
9. GOCE DE LAS VISTAS
Escocia le sorprenderá con bellísimos paisajes en cualquier punto de su geografía en que se encuentre usted. Pero hay algunos lugares especiales donde su vista podrá abarcar aún más de esta belleza. Salga a contemplar paisajes espectaculares, bien desde la cima de la colina de Calton en Edimburgo, desde el Monumento Nacional a William Wallace, cerca de Stirling o desde cualquiera de nuestros 290 Munros (montañas de más de 915 m) y déjese embriagar por las hermosas vistas.
Fuente: Visitscotland.com
