Equivocarse al repostar, un caro error

Cada año en España más de las 72.700 conductores se equivocan de tipo de combustible al repostar sus vehículos (turismos, motos y furgonetas), derivando esto en errores y averías mecánicas

Equivocarse al repostar, un caro error
repostar Borja Fadón

Mediante el cálculo de los casos atendidos por el Real Automóvil Club de España (RACE), y en relación al parque de turismos, motos y furgonetas que circulan por España (aproximadamente 27,2 millones de vehículos), se calcula que cada año más de 72.700 conductores se habrían confundido en la estación de servicio al repostar.

Según recoge el informe del RACE, durante el pasado año 2015 se incrementó en un 15% el número de conductores que llamó al teléfono de asistencia del RACE por un error en el tipo de combustible elegido para repostar su vehículo, con un total de 9.666 intervenciones. De éstas, 5.539 operaciones fueron por echar gasolina a un vehículo diésel (un 13,8% más que en 2014) y las 4.127 asistencias restantes fueron por el error contrario (+16,9%).

Hay menos casos de echar diésel en un coche de gasolina que viceversa porque las mangueras de gasóleo son más anchas que las de gasolina, dificultando el error del conductor.  Mientras que al revés es más común equivocarse, afectados gravemente sistemas como el filtro o la bomba de inyección del motor diésel, que en el caso de verse dañada por circular con el combustible incorrecto, habría que sustituirla.

En cualquier caso se trata de un número de equivocaciones más elevado y por lo tanto más frecuente de lo que se pueda pensar. Para hacerse una idea, con todo el combustible que se ha repostado de forma equivocada en el 2015 se podría llenar más de una piscina olímpica, o dar 1.209 veces la vuelta al mundo.

Si se detecta el problema en el propio surtidor, es muy importante no mover el coche, ni siquiera introducir la llave de contacto, para evitar que el combustible equivocado entre en el circuito y en la bomba. Sin embargo, en la mayoría de ocasiones el conductor se percata del error una vez ha iniciado la marcha (el coche empieza a dar tirones, perder potencia…), aumentando las posibilidades de agravar la avería mecánica. Entonces, lo mejor es parar en un lugar seguro, y si tiene que salir del coche, ponerse el chaleco, señalizar la zona, y llamar a la asistencia.

En esta situación es gratificante disponer de una cobertura de seguro lo más amplia posible. Así por ejemplo de los 7,3 millones de vehículos que tienen póliza con RACE, 3,62 millones de automóviles disponen de cobertura por combustible. Este tipo de asistencia se limita a llevar el vehículo a un taller profesional, lo que, además de dejar al usuario sin coche durante un tiempo, implica un importante gasto ya que se procederá a desmontar el depósito, bombear el combustible equivocado y sacar el filtro principal.

Para evitar estas consecuencias, el RACE ha puesto a disposición de los clientes un nuevo servicio de “Asistencia para extracción de combustible”, que con sólo una llamada, resuelve el problema en 50 minutos. De momento, está disponible en Madrid, Barcelona, Sevilla, Murcia, Valencia y Bilbao (y en un radio de acción de unos 50 kilómetros), y próximamente, en toda España.

Y por encima de cualquier otro aspecto, se recomienda no intentar hacer algo sin tener los conocimientos necesarios. Por ejemplo, intentar sacar el combustible sin los medios adecuados puede provocar un derrame, con el alto riesgo de incendio o explosión (sobre todo en una estación de servicio). O nunca permitir que tiren el combustible a una alcantarilla, ya que podría estar incurriendo en un posible delito medioambiental.

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