‘Yo no quiero matar niños’

La Policía israelí ha detenido al joven palestino que se atrincheró este jueves durante ocho horas en el interior de la Embajada británica de Tel Aviv portando un arma -que según se comprobó después era de plástico- para exigir la concesión de un asilo político.

Los agentes aseguran que no ha habido heridos y que lograron desarmar al palestino cuando éste dejó su pistola para comer los alimentos que las autoridades le proporcionaron. Después, en un comunicado la propia Policía ha informado de que se trataba de un arma de plástico.

La portavoz de la Embajada, Karen Kaufman, ha confirmado que el joven fue arrestado a través de una operación realizada por la Policía israelí en colaboración con oficiales británicos.

«Por lo que respecta a la Embajada, el episodio acabó», ha dicho Kaufman, quien se ha mostrado «muy agradecida a los agentes israelíes por su excelente cooperación durante el incidente».

Nadim Injaz, de 28 años de edad, vive en la ciudad cisjordana de Ramala y es informador de las fuerzas de seguridad israelíes. El joven logró entrar en la Embajada británica saltando una valla y permaneció allí durante ocho horas para pedir asilo político porque, según dijo en directo a una televisión local, prefería morir a volver a Cisjordania.

Injaz dijo que estaba pidiendo asilo porque temía que los militantes palestinos quisieran matarle, por lo que también trató de suicidarse:

«Si nadie me ayuda pronto a salvar mi vida, acabaré con ella aquí mismo».

Según Injaz, los militantes palestinos en Cisjordania le dijeron que sólo podría volver a Ramala si llevaba a cabo un ataque contra israelíes, por lo que, según ha dicho, prefirió acudir a la Embajada.

«Yo no quiero matar niños», dijo llorando en su dramática entrevista por televisión.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído