(PD/Agencias).- Crece la confusión sobre la próxima ejecución del ex dictador iraquí Sadam Husein. El jefe de su defensa, Khalil Dulaimi, dijo que funcionarios estadounidenses le habían informado de que la custodia del detenido había pasado a las autoridades iraquíes, lo que fue después desmentido desde EEUU.
En concreto, el portavoz del Departamento de Estado de EEUU, Tom Casey, dijo que el «estatus» del depuesto presidente iraquí Sadam Husein, hasta ahora en manos estadounidenses, «no ha cambiado».
También hay confusión acerca de cuándo se ejecutará la condena. Dulaimi dijo en una cadena de radio que será ejecutado en la horca en la madrugada del sábado. De momento, tal y como informaron fuentes de la defensa, han recibido la orden por parte de EEUU de que recojan las pertenencias personales del ex dictador.
Esto confirmaría lo adelantado por el primer ministro iraquí, Nuri Maliki, quien aseguró que no se revisará la sentencia a muerte de Sadam Husein ni se retrasará la ejecución de la condena. «Nadie puede oponerse a la ejecución», añadió Maliki.
Este viernes, uno de los colaboradores del primer ministro dijo que «todos los documentos necesarios para la ejecución han sido completados y el expresidente iraquí será ejecutado el sábado antes del alba o el jueves al fin de la fiesta musulmana del Sacrificio (‘Eid Al Adha’)».
Sentencia inapelable
Mientras, los líderes de la minoría kurda iraquí están presionando a las autoridades para que retrasen la ejecución al menos hasta que termine el nuevo juicio al que se está sometiendo al ex dictador por un delito de genocidio contra este pueblo en los años 80.
Por su parte, el ministro turco de Asuntos Exteriores, Abdula Gul, aseguró que los iraquíes tienen que pensárselo muy bien antes de ejecutar a Sadam Husein. Gul agregó a los medios de información: «El juicio y la ejecución de Sadam Husein es un asunto interno de los iraquíes. Ellos saben como tratar dicho problema. Nosotros no interferiremos».
El Tribunal de Casación de lo Penal iraquí ratificó el día 26 la sentencia de muerte contra el depuesto presidente de Irak y sus dos antiguos colaboradores, que según las leyes iraquíes tendrán que ser ejecutados antes de 30 días después de la ratificación de la sentencia, que no podrá ser apelada.
Medios internacionales apuntan a este fin de semana como fecha más probable para ejecutar la sentencia de muerte, antes del comienzo de la festividad del Sacrificio (el domingo), que marca el fin de la peregrinación anual a La Meca (‘Hajj’). También se especula con el escenario del ajusticiamiento, que podría ser la denominada ‘Zona Verde’ de Bagdad.
