El presidente Bush realizó este martes las declaraciones más duras hasta ahora sobre las circunstancias que rodearon la ejecución del dictador Sadam Husein, calificándola de «una especie de matanza por venganza«. A su juicio, gestos como estos apuntan a que el Gobierno del primer ministro Nuri al Maliki «todavía tiene que madurar«.
«Me sentí decepcionado y sentí como caían (por la trampilla), especialmente en la ejecución de Sadam Husein», ha asegurado Bush en una entrevista a la cadena pública estadounidense PBS.
En este sentido, Bush ha asegurado haber trasladado a Al Maliki su decepción por la forma de proceder en la ejecución de Sadam, grabada de forma ilegal con cámara de móvil, en la que fue increpado por testigos de la misma con insultos e interpelaciones violentos en su contra.
Además, un vídeo oficial de la muerte del hermanastro de Sadam y jefe de los servicios de Inteligencia del régimen, Barzan Ibrahim al Tikriti -ejecutado junto con que fuera jefe de la Corte Revolucionaria, Awad Hamed al Bandar, dos semanas después del ahorcamiento de Sadam- muestra la decapitación del reo en el momento en el que cae por la trampilla.
Por otra parte, Bush ha admitido que el «mensaje» que envía las ejecuciones «es un mensaje confuso» que, según el presidente estadounidense le dice a la población: «Organizasteis un juicio y disteis a Sadam la justicia que el nunca le dio a otros», aunque, no obstante, reconoció que «en relación a su ejecución (de Sadam), ésta parecía una especie de matanza por venganza».
