Hillary Clinton y Barack Obama pugnan por el voto de la población negra

(PD/Agencias).- Barack Obama y Hillary Clinton se han batido este domingo en una suerte de duelo electoral en Selma (Alabama), adonde acudieron por separado para conmemorar una marcha en pro de los derechos civiles y con la intención de ganarse el voto de la población negra.

Obama es el primer afroamericano con una oportunidad real de ganar no sólo la candidatura presidencial del partido demócrata, sino también las elecciones del próximo año.

Hillary Clinton es la esposa del ex presidente Bill Clinton, un hombre del Sur, tan popular entre la gente de color que fue apodado como «el primer presidente negro» de EEUU.

Así, la comunidad afroamericana se encuentra en la dulce disyuntiva de escoger entre dos candidatos que le gustan.

Tercero en la lista está el ex senador John Edwards, de Carolina del Norte, otro Estado por debajo de la línea de Mason-Dixon, que marca el límite del territorio histórico de los negros de EEUU tras su llegada de África.

En su anterior campaña presidencial, Edwards denunció la existencia de dos Estados Unidos, uno el de los privilegiados y otro, estancado, el del resto, un mensaje con el que se ganó muchos votantes negros.

Sin embargo, Edwards no aceptó una invitación para hablar en Selma y dejó que esa ciudad, de unos 20.000 habitantes, quedase como escenario de la pugna entre los dos caballos de cabeza en la carrera por la candidatura demócrata.

Obama habló en la iglesia Brown Chapel y, bajando la misma calle, en la First Baptist Church estaba Clinton.

Los dos fueron a Selma para conmemorar el llamado ‘Domingo Sangriento’, que tuvo lugar el 7 de marzo de 1965, cuando la policía de Alabama cargó contra unas 600 personas que participaban en una marcha a favor de los derechos civiles en el puente Edmund Pettus.

Entonces, Obama tenía tan sólo cuatro años. Algunos negros se preguntan si él comparte sus propias experiencias de discriminación, no sólo por su juventud, sino también porque su padre nació en Kenia y su madre era blanca.

Obama dijo en Brown Chapel que sí, con una historia, la de su vida. Contó que su padre, que cuidaba cabras en África, cuando niño sólo recibió una beca del Gobierno de Washington para estudiar en EEUU por los efectos del movimiento en pro de los derechos civiles.

«Yo estoy aquí, ante vosotros, porque vosotros fuisteis a la marcha» en 1965, dijo Obama. «Yo estoy aquí porque vosotros os sacrificasteis por mí», afirmó.

El senador no mencionó que creció en Hawai e Indonesia, lejos de los Estados del Sur donde se decidió el futuro de los negros en la sociedad estadounidense.
La estrategia de Hillary Clinton

Clinton intentó hacer una conexión similar con su audiencia y apuntó que antes del movimiento en pro de los derechos civiles, las mujeres no podían ser parte de los jurados en Alabama.

La senadora dijo que gracias a esa lucha, el afroamericano Obama puede ser actualmente candidato a la Presidencia, así como el latino Bill Richardson, gobernador de Nuevo México, «y yo misma».

Es una lucha que ella experimentó de cerca. Nacida en 1947, Clinton conoció a Martin Luther King y se interesó por la política en el esplendor del movimiento para reclamar los derechos de los negros.

Quien se ha ganado el apoyo de los afroamericanos es, sin embargo, Bill Clinton, quien fue también a Selma y cuyo nombre fue incorporado este domingo al ‘Salón de la Fama de los Derechos Políticos’.

El desafío para la senadora es lograr que el cariño por su marido se transforme en votos para ella.

Aparte de las referencias personales, el contenido de los discursos de los dos candidatos fue similar. Ambos denunciaron las desigualdades en educación y salud, así como el «abandono» de los damnificados del huracán ‘Katrina’, que en su mayoría son negros.
Un resultado incierto

Por ahora, se desconoce el resultado del duelo entre los dos políticos, pero Obama es el hombre en alza entre los negros, un electorado clave para los demócratas porque vota de forma mayoritaria por ese partido.

En enero, una encuesta del diario ‘The Washington Post’ indicaba que un 60% de los miembros de esa minoría apoyaba a Clinton, frente a un 20% para Obama.

En su último sondeo es Obama quien va en cabeza, con un 44%, comparado con el 33% de Clinton.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído