El musical donde cantan «Quiero ser como Osama»


(PD/Agencia EFE).- Unas mujeres que lucen un burka rosa y que, armadas con una ametralladora, rodean a un terrorista que canta «Quiero ser como Osama». Toda esta locura histriónica es el plato fuerte del controvertido espectáculo Yihad: el musical, que se estrena mañana en Edimburgo.

Hasta el próximo 26 de agosto y dentro del festival alternativo de Edimburgo Fringe, la capital escocesa acogerá un musical que, según sus responsables, es un «alocado galope por el absurdo mundo del terrorismo internacional» y que tiene todas las papeletas para herir sensibilidades en Oriente y Occidente.

No es para menos si se tiene en cuenta que su protagonista, un campesino afgano de explosivo apellido, Sayid al-Boom, tiene que decidir entre seguir en el lado bueno o pasarse al oscuro, junto a unos terroristas que intentan captarle para su organización. «Quiero ser como Osama. Quiero abrirme camino a la fama con una bomba. Sé que la gente me puede detestar, pero, oh Dios, no me ignorarán cuando la CIA me ponga precio», canta uno de los terroristas en el número principal del espectáculo para embaucar a Sayid.

La ironía y el sarcasmo de ‘Silk Circle Productions’

La letra no es lo único que llama la atención de este tema, pues su puesta en escena, en la que aparece un coro de mujeres con burkas rosas y ametralladoras de cartón, termina de cerrar este círculo de ironía y sarcasmo obra de la compañía neoyorquina Silk Circle Productions. «Como todas las buenas comedias Yihad: el musical aborda, de un modo desenfadado, un asunto de actualidad que la gente conoce, con el que puede conectar con humor y, como dice el refrán, ponerle al mal tiempo buena cara», ha explicado James Lawler, productor del espectáculo, en un comunicado de prensa.

Para que los espectadores puedan poner buena cara, la compañía cuenta en clave musical la historia de un campesino que es embaucado por una misteriosa mujer para, con la promesa de un futuro mejor, trabajar en una supuesta compañía afgana de exportación de amapolas. Sayid descubre finalmente que la organización es una célula terrorista que pretende poner bombas en Occidente y cuyos miembros intentan lavarle el cerebro para que se haga un yihadista de los suyos mediante bailes y canciones irreverentes.

Reclamos a la web de ‘Downing Street’

Ya hay algunos que, antes del estreno, se han levantado contra lo inapropiado de que este musical se estrene en Escocia, escenario hace un mes de un atentado fallido contra el aeropuerto de Glasgow, y en un país como el Reino Unido, que sigue en estado grave de amenaza terrorista. En la página web del 10 de Downing Street, residencia del Primer Ministro británico, varios ciudadanos piden a su inquilino, Gordon Brown, que «condene este retrato de mal gusto del terrorismo y sus víctimas».

En respuesta a esta petición, Lawler ha contestado que no tienen intención de ofender o insultar con este espectáculo. Es tan sólo una comedia musical, en línea con la tradición británica de reirse y no rendirse ante las amenazas, ha señalado Lawler.

También hay críticas para Occidente, con la inclusión del personaje de una periodista con nombre sospechosamente similar al de un canal de noticias estadounidense, Foxy Redstate, que intenta convencer a Sayid para que la infiltre en la organización y así conseguir la exclusiva que la lleve a la fama. El protagonista acaba convertido en una marioneta que deberá elegir la compañía más apropiada entre la que le ofrecen los yihadistas, la periodista estadounidense y su hermana, quien intentará devolverle al lado bueno junto a un francés partidario de su rendición.

Además de Sayid al-Boom y Foxy Redstate, un tal Hussein al-Mansour y una tal Noor completan el reparto en esta producción en la que también hay un hueco para el romanticismo, con un curioso tema, I only see your eyes (Sólo veo tus ojos), que pretende ser una canción de amor.

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA

Lo más leído