(Agencias).- Diecinueve 19 niños han fallecido este miércoles en un atentado suicida con camión bomba perpetrado contra una concurrida zona residencial de mayoría chií de la ciudad de Tal Afar, situada en el noroeste de Iraq, y que causó la muerte de 28 personas y heridas a otras 40.
La fuerte explosión causó el derrumbe de casas mientras muchas familias se preparaban para pasar el día fuera. Por ello, las autoridades han advertido de que el balance de víctimas podría aumentar. «Los equipos de rescate están todavía buscando entre los escombros», explicó Ali Abbo, presidente del Comité de Derechos Humanos.
Asimismo, indicó que el hospital de Tal Afar ha llegado al máximo de su capacidad, obligando a las ambulancias a trasladar a muchas víctimas a Dahuk, ciudad situada 70 kilómetros más al norte.
El atentado fue cometido con un camión de basura cargado de explosivos y cubierto por una fina capa de materiales de construcción. Dentro de la hora en que se produjo el atentado, las autoridades impusieron el toque de queda en toda la ciudad.
La ciudad de Tal Afar, que fue citada por el presidente estadounidense, George W. Bush, el pasado mes de marzo para exponer el éxito de las operaciones militares en la zona contra los insurgentes, ha sido un objetivo frecuente de ataques de la milicia suní el año pasado. La ciudad vivió uno de los días más sangrientos de la guerra de Iraq, cuando el pasado 27 de marzo varios camiones bomba mataron a unas 152 personas.
Por otro lado, fuentes policiales indicaron que al menos 14 personas fallecieron o fueron encontradas muertas hoy en otras partes de Iraq y que incluyen los cadáveres de cinco soldados que sufrieron una emboscada por parte de hombres armados mientras volvían a sus hogares después de haber salido por la noche en Tikrit, mientras que nueve civiles fallecieron por una bomba colocada en una carretera durante la hora punta en una zona de mayoría chií cerca de Bagdad.
