(PD/Agencias).- Tres facinerosos han sido detenidos, dos en Eslovaquia y una en Hungría, acusadas de participar en el intento de venta de 481 gramos de uranio 235 y 238, que han sido confiscados por la policía.
Según la policía, se trata de uranio en polvo susceptible de ser usado para fabricar bombas sucias. Al parecer, los detenidos esperaban vender el material por un millón de dólares (unos 670.000 euros).
Según ha informado Michal Kopcik, vicepresidente de la jefatura de Policía, se trata de casi medio kilo de uranio «tanto más peligroso porque se encuentra en polvo y según los primeros análisis se puede utilizar para fabricar bombas sucias, y en distintas formas de actos terroristas».
«Se trata de una valija de 481,4 gramos» de material nuclear, ha informado previamente el portavoz policial Martin Koch, que ha confirmado que el material confiscado es uranio 235 y 238, aunque no ha precisado si el grado de enriquecimiento del material radiactivo alcanza el nivel necesario para su uso con fines militares. Tampoco ha revelado datos sobre los supuestos destinatarios o compradores del material. Al parecer, sí se sabe que esperaban vender el material por un millón de dólares (unos 670.000 euros).
Las detenciones tuvieron lugar ayer en la región oriental eslovaca, fronteriza con Hungría. Dos de las detenciones se produjeron ayer, y una tercera en Hungría. Se trata de de un ciudadano de Ucrania y dos de Hungría, uno de los cuales tenía permiso de residencia en Ucrania y sus edades oscilan entre los 40 y los 51 años.
En 2003, Brno, en la República Checa, fueron detenidos dos ciudadanos eslovacos, después de que llevaran a cabo una venta de tres kilogramos de uranio natural por valor de 715.000 dólares. Con anterioridad, en 1994, los checos incautaron otra valija de casi tres kilos con uranio para fines bélicos a un grupo dirigido por el ciudadano ruso Alexandr Shcherbinin y el empresario y antiguo oficial del ejército checoslovaco y físico Jaroslav Vagner.
