La Unión Europea está muy lejos de su objetivo para 2010 de reducir un 50% el número de víctimas en accidentes de circulación con respecto a 2001. El Parlamento Europeo adoptó un informe que propone incluir el sistema de emergencia europeo eCall en el equipamiento de serie de todos los vehículos nuevos a partir de 2010. Además, los diputados subrayan que medidas sencillas como la reducción del peso de los asientos o los neumáticos servirían para rebajar las emisiones de CO2 de los vehículos.
El informe del Parlamento Europeo, aprobado por 417 votos a favor, 6 en contra y 5 abstenciones, señala que los sistemas de vehículos inteligentes pueden ayudar a reducir la congestión, la contaminación y el número, así como la gravedad de los accidentes de la circulación, «pero que su índice de penetración en el mercado todavía es muy bajo». Por eso, los diputados sugieren a la Comisión que dé prioridad a los países donde la disponibilidad de sistemas inteligentes sigue siendo escasa.
El texto recuerda que 13 Estados miembros, entre ellos España, y tres países terceros han firmado ya el Memorándum de Acuerdo de eCall y emplaza a los países de la UE que aún no hayan suscrito el memorándum a que lo hagan antes de mediados de 2008. Asimismo, respalda las negociaciones sobre el acuerdo voluntario para incluir el eCall en el equipamiento de serie de todos los vehículos nuevos a partir de 2010.
Un sistema que llama a los servicios de emergencias
El sistema eCall es un servicio paneuropeo de llamada de emergencia desde el vehículo. En caso de accidente, el sistema llamará automáticamente a los servicios de emergencia y les proporcionará la localización del vehículo. Según la Comisión Europea, cuando se haya implantado totalmente, este servicio podría salvar hasta 2.500 vidas al año en Europa.
Coches menos contaminantes
En cuanto a las emisiones de CO2 de los vehículos, la Eurocámara destaca que existen medidas simples y efectivas, como la reducción del peso de asientos y neumáticos, de los termo acumuladores de los motores o la recuperación de energía durante el frenado, pero que muchos vehículos no las han incorporado. Por eso, pide a los Estados miembros y a la Comisión que exijan la introducción de este tipo de medidas en los vehículos.
La ponente del informe, la socialista húngara Zita Gurmai, insta a los Estados miembros y a la Comisión a que promuevan incentivos fiscales para la adquisición de vehículos dotados de equipamientos ecológicos y dispositivos de seguridad inteligentes, en la misma línea de los incentivos existentes para la compra de coches menos contaminantes.
Gurmai pide a la industria del automóvil que tenga en cuenta los recientes instrumentos de seguridad a la hora de diseñar vehículos nuevos, así como que prevea instrumentos para medir e indicar el consumo de energía y los datos más importantes para el medio ambiente como, por ejemplo, las emisiones reales de CO2 y de partículas.
Sistemas que ayudan en la conducción
Igualmente, los diputados recuerdan el objetivo de la Comisión de lograr, a partir de 2012, que el 100 % de los vehículos nuevos tenga instalado el control electrónico de la estabilidad e indican que podrían salvarse 4.000 vidas y evitarse 100.000 heridos en las carreteras europeas si todos los vehículos dispusieran de control electrónico de estabilidad. Este sistema ayuda a evitar las colisiones al reducir el peligro de derrape. Funciona estabilizando el vehículo, dentro de unos límites físicos, mediante la intervención activa de los frenos de una o más ruedas y la adecuación de la potencia del motor.
