(PD).- El Ministerio del Interior ha reforzado la seguridad y ha intensificado los controles en los últimos días con vistas a evitar atentados de ETA, según informó esta mañana el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho.
Según dijo, estos controles se han intensificado en la zona fronteriza con Francia -de donde proceden los coches-bomba de ETA- y en los núcleos urbanos. También explicó que esas medidas «se van a reforzar a lo largo de esta semana y hasta nueva orden».
El próximo domingo se celebra el Día de la Hispanidad y, según recordó Camacho, la banda terrorista «ha cometido atentados en las últimas semanas y, sin duda, su intención es seguir cometiéndolos».
«Se trata de prevenir y evitar la comisión de atentados y, por tanto, garantizar la seguridad de nuestros ciudadanos. A los ciudadanos lo que hay que trasladar es que la Policía y la Guardia Civil trabajan coordinadamente las 24 horas para garantizar la seguridad», afirmó Camacho antes de comparecer ante la comisión de Interior para explicar los presupuestos de su departamento.
La noche del 12 de octubre de 2001, un vehículo cargado con 20 kilos de explosivo estalló en el aparcamiento subterráneo de la Plaza de Colón, en Madrid, debajo de la tribuna donde el Rey había presidido por la mañana el desfile militar con motivo de la Fiesta Nacional.
El coche había sido trasladado hasta el aparcamiento de Colón por la grúa municipal al estar mal aparcado en una céntrica calle de Madrid, cerca de un edificio nuevo de Telefónica.
La explosión provocó heridas a 17 personas, destrozó 66 vehículos y dañó parte de la estructura del edificio. En el lugar donde estaba el coche bomba, un Ford Fiesta blanco con matrícula falsa, se formó un agujero de siete metros cuadrados.