Las autoridades militares de Corea del Sur están interrogando a tres miembros de una agencia del Ministerio de Defensa en relación con una filtración de información militar sensible.
La investigación comenzó tras confirmarse que una empresa local obtuvo, en los últimos años, datos relativos a documentos militares que no podían hacerse públicos.
Ahora se indaga sobre la implicación de tres miembros del Programa de Administración de Adquisición de Defensa (DAPA, siglas en inglés), agencia encargada de los contratos y ventas de armamento y material militar en el Ejército surcoreano.
El portavoz del Ministerio de Defensa surcoreano, Won Tae-jae, dijo que las autoridades están analizando los documentos de la empresa y en caso de que se trate de una filtración de documentos confidenciales la investigación será llevada a cabo por el fiscal militar.
Pese a que tres miembros de la DAPA negaron su implicación, un responsable de la fiscalía militar apuntó que serán procesados dado que no está autorizado el uso de tales documentos fuera del estamento militar, aunque no estén clasificados como confidenciales.
Los documentos en cuestión incluyen informaciones sensibles, como el plan del Gobierno surcoreano para que Rusia pague sus deudas al país asiático con armas.
La empresa involucrada en la filtración estaba siendo investigada por la justicia surcoreana debido a una supuesta evasión de impuestos por valor de 7.000 millones de wones (5,3 millones de dólares).
