La ideología política del Papa se apoderó del Vaticano, el Sumo Pontífice recibió a su amigo Luiz Inazio Lula da Silva y manifestó su agrado por verlo «caminando por la calle».
«Le agradezco su gesto de venir, se lo agradezco mucho, y estoy contento de poder verlo caminando por la calle», señaló el Papa en su castellano natal, mientras que Lula le respondió dándole las «gracias».
La secuencia de imágenes se puede ver en la cuenta del político sentenciado con cargos de corrupción pasiva y blanqueo por la justicia de su país, pero que está en libertad en espera del pronunciamiento del Tribunal Superior de Justicia de Brasil.
“Estou contente de te ver caminhando pela rua.”
Vídeo: Ricardo Stuckert pic.twitter.com/CrFFkFJxOn— Lula (@LulaOficial) February 15, 2020
Los medios no tuvieron acceso a la reunión privada de los latinoamericanos, no hubo cámaras ni periodistas, pero se conoce que la misma duró casi una hora, y el propio Lula informó a los medios que hablaron de desigualdad, pobreza y defensa del medioambiente. Del evento tampoco fue divulgado ningún comunicado por parte de la Santa Sede, producto del carácter reservado del mismo.
Es el primer viaje al extranjero del expresidente brasileño desde que salió de la cárcel de Curitiba el pasado 9 de noviembre, donde estuvo 19 meses detenido por sus vínculos con la empresa petrolera estatal Odebrecht.
El expresidente brasileño tuvo que pedir un permiso a los jueces para salir del país y aplazar el interrogatorio previsto en Brasilia para el 11 de febrero.
«La razón de mi visita es hablar con el papa del asunto de las desigualdades y de la defensa de una buena política para el medioambiente», explicó Lula como si se encontrara en un acto de campaña.
Sus declaraciones a la prensa ocurrieron en la sede romana del mayor sindicato italiano, la Confederación General Italiana del Trabajo (CGIL), donde fue acogido por un nutrido grupo de representantes y líderes sindicales italianos.
Como no podría ser de otra forma, Lula aprovechó la oportunidad para reunirse con dirigentes del gobernante Partido Democrático, entre ellos el secretario general de la formación, Nicola Zingaretti.