na fragata francesa capturó este viernes a los 12 piratas que intentaron hace tres días asaltar un petrolero con bandera de Hong Kong
Finalmente, son 54. Han recibido un brevísimo e intensivo entrenamiento de apenas cuatro días en la Escuela de Infantería de Marina con base en Cartagena (Murcia) para familiarizarse con el armamento de guerra que emplearán durante los próximos meses y con las tácticas de asalto que utilizan los piratas de Somalia.
Los agentes de seguridad privada que protegerán a los atuneros españoles que faenan en aguas del Índico partieron este viernes desde el aeropuerto alicantino de El Altet con destino a las Islas Sheychelles en un avión Boeing 707 de la Fuerza Aérea Española.
Lo han hecho el mismo día en que la vicepresidenta De la Vega -tras intentar uinfructuosamente echarle la culpa la pifia al juez Garzón y después a la ministra Chacón- asumió la responsabilidad de haber traido a España a Abdu Willy y al otro pirata.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, ante un aluvión de preguntas sobre la desastrosa gestión del Gobierno del secuestro del atunero Alakrana, leyó un texto cuya tesis consistía en que «cuando se cumple la ley, no se comete ningún error».
Fernández de la Vega amparó su decisión, la detención de los piratas y su traslado a España, en el mandato legal de la Operación Atalanta.
«Dicha norma recoge la obligación de detener a las personas que participen en secuestros de buques, y establece que las personas detenidas por actos de piratería en alta mar o en costa sean entregadas para su enjuiciamiento con carácter prioritario a las autoridades del país de bandera del buque, esto es, España».
Aseguró seguró que en «ningún momento se planteó el traslado de los dos piratas detenidos a Kenia».
ESCOLTAS CONTRA ETA
Se presentaron 70, pero sólo han quedado 54, que se repartirán de cuatro en cuatro en cada atunero con un sueldo de casi 400 euros al día.
Algunos habían trabajado antes como escoltas de amenazados por ETA y casi todos rondan los 30 años.
Bastantes cuentan con experiencia militar -algunos son ex miembros del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) del Ejército- y han sido contratados a través de la empresa de seguridad Segur Ibérica.
La Asociación Española de Escoltas desaconsejó en un comunicado a los armadores que contrataran para este servicio a mercenarios extranjeros, más baratos, aduciendo que corrían el riesgo de que les entregasen a las mafias.
CUSTODIA DE PRISIONEROS
Permanecerán embarcados durante un período inicial de cuatro meses. El Ministerio de Defensa se ha hecho cargo de su breve instrucción y ha obligado al medio centenar de agentes a firmar una cláusula de confidencialidad sobre su labor.
El objetivo es evitar que aireen los detalles de su misión, en medio de la polémica provocada por el secuestro del atunero vasco «Alakrana».
El mismo secretismo rodeó este viernes el embarque de los vigilantes: llegaron al aeropuerto de El Altet poco antes de las dos de la tarde en un autocar procedente de Cartagena y fueron conducidos directamente a la pista, para evitar que pudieran hablar con los medios de comunicación.
CLASES DE PSICOLOGÍA
Además de cuestiones técnicas, también han recibido lecciones psicológicas.
Vicente Cruz, presidente de la Asociación de Escoltas, lo explica:
«Les someten a una presión muy alta para que en una situación real la tengan asumida».
«Les enseñan a responder con calma y sin cometer errores a 180 pulsaciones por minuto tras haber subido cinco pisos por las escaleras».
La finalidad de las armas de guerra que el Gobierno ha permitido embarcar en los atuneros es disuadir a los piratas con un armamento similar al suyo.
También han recibido instrucción teórica y práctica en la Base de Cartagena, no sólo sobre el uso del armamento, sino también en materia de supervivencia en el mar, detención y custodia de prisioneros, primeros auxilios y sobre las tácticas de abordaje empleadas por los piratas.
EL AVIÓN Y LOS SECRETOS
El avión despegó a las 16,40 horas y tenía prevista su llegada a las Islas Sheychelles esta madrugada (la mayoría de los atuneros españoles que faenan en la zona operan desde el puerto de La Victoria), tras una escala previa en Djibuti.
Cada vigilante llevará un fusil de asalto HK de 5.56 milímetros de calibre. Son los más modernos con que cuentan las Fuerzas Armadas.
A bordo de los buques contarán además con ametralladoras medianas MG de 7,62 mm. y pesadas Browning de 12.7 milímetros. El armamento viajó en avión aparte.
A raíz de la crisis desatada por el secuestro del «Alakrana», el Gobierno Zapatero aprobó el pasado día 30 una orden que permite utilizar armamento de guerra (fusiles de asalto y ametralladoras) a los agentes que viajarán a bordo de los atuneros.
No obstante, la orden especifica que «los vigilantes de seguridad harán un uso limitado de este tipo de armas, que tendrán como único objeto la prevención y disuasión eficaz de posibles ataques».
Durante su estancia en aguas al sur del Golfo de Adén, desarrollarán labores de protección de trece atuneros españoles.
Cada buque contará con cuatro agentes a bordo, que efectuarán turnos durante las 24 horas del día.
LOS MOMENTOS CRÍTICOS
Los momentos críticos en la que estos buques son más vulnerables a los ataques son al amanecer y al anochecer, así como cuando navegan a menos de 13 nudos con las redes echadas.
En sus abordajes, los piratas utilizan un variopinto arsenal que abarca desde lanzagranadas hasta fusiles kalashnikov de fabricación rusa, pistolas, machetes e incluso hachas.
LOS FRANCESES NO SE ANDAN CON BROMAS
Una fragata francesa capturó este viernes en una embarcación a 12 piratas que iban armados con fusiles de asalto. Se trata de los mismos que intentaron hace tres días asaltar un petrolero con bandera de Hong Kong.
Las detenciones se produjeron a 800 kilómetros al noreste de las islas Seychelles y a 1.200 al este de la costa de Somalia, lo que supone la acción más alejada realizada hasta ahora por la ‘operación Atalanta’.
«Los piratas han empezado a extender sus actividades hacia mar abierto», informó el almirante Christophe Prazuck, que dirigió la operación desde la fragata ‘Floreal’.
En su opinión, esto demuestra que los piratas, vigilados en sus anteriores zonas de actuación en el golfo de Adén, han cambiado de «tendencia», buscando zonas con menos presencia militar.
Ni el almirante ni ‘Atalanta’ explicaron cuál será el destino de los detenidos. Lo más probable es que sean trasladados a Kenia, como se hace con la mayoría de los piratas arrestados en el marco de la operación.