La oposición mauritana consideró hoy que el ataque lanzado por el Ejército de su país el pasado jueves contra la red terrorista Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) en territorio de Mali coloca a Mauritania en «una guerra no declarada».
«Estos acontecimientos de extrema gravedad sitúan a nuestro país en una situación de guerra no declarada», indicó la Coordinadora de la Oposición Democrática (COD) en un comunicado.
El ministerio mauritano del Interior anunció ayer, viernes, que el Ejército de su país mató a seis miembros de AQMI en un operativo lanzado el jueves cerca de la frontera entre Mauritania y Mali.
Precisó que la acción se desarrolló fuera de territorio mauritano, sin referirse expresamente a Mali, y que tenía como objetivo evitar un ataque terrorista planificado para el 28 de julio contra una base mauritana cerca de Basiknu (1.400 kilómetros al este de Nuakchot).
«El objetivo de esta operación sigue siendo todavía ambiguo; el ministerio del Interior afirmó que se trataba de evitar un ataque terrorista, mientras que los franceses declararon que intentaban liberar al rehén francés Michel Germaneau», subraya la nota.
La COD añadió que «es todavía más grave» el hecho de que «la operación se haya desarrollado con la participación de tropas extranjeras y, probablemente, sin la concertación previa con el país en cuyo territorio se produjo».
Asimismo, la oposición recordó que «las fuerzas armadas nacionales no deben involucrarse en semejantes operaciones más que para la defensa del territorio nacional y en ningún caso sin notificarlo al Parlamento».
La COD, que agrupa a las principales fuerzas de la oposición, exige que se clarifique «la situación de las fuerzas extranjeras que se encuentran actualmente en nuestro territorio y cuya presencia confirmó la operación del jueves».
