El delegado del Gobierno marroquí en El Aaiún, Mohamed Jelmous, negó este miércoles en un comunicado el fallecimiento de dos de los cuatro saharauis denunciado horas antes por el Frente Polisario.
En su escrito, Jelmous negó el deceso de Abdeslam Lansari y de la mujer Buhasria Elgalia y aseguró que sus muertes son «ficticias» y que los «únicos muertos civiles» siguen siendo el español Baby Hamady Garguer Boujemaa, «herido mortalmente por un vehículo en los incidentes» de El Aaiún, y Daoudi Brahim, «muerto en el hospital militar de El Aaiún por una neumonía», «como lo atestigua el certificado de fallecimiento firmado por los médicos».
Además, el delegado del Gobierno marroquí en El Aaiún aseguró que «no hay ningún cadáver en la morgue del hospital militar» de esta ciudad. El Ejecutivo marroquí respondió así a la versión del Frente Polisario, que aportó los nombres de cuatro fallecidos y que subrayó que en dicha morgue permanecen 36 cadáveres que Rabat se niega a identificar.
Asimismo, las autoridades marroquíes han elevado a once el número de fallecidos entre sus fuerzas de seguridad, después de que uno de los agentes que participó en el desmantelamiento del campamento de protesta muriese este miércoles a causa de las heridas tras una «agresión salvaje», informa la agencia oficial MAP.
