Amnistía Internacional (AI) afirmó este lunes que las violaciones cometidas en gran escala por miembros del ejército en la República Democrática del Congo se deben a la falta de medidas del Gobierno para llevar a la justicia a los autores de abusos contra los derechos humanos.
Nuevos informes conocidos recientemente señalan que combatientes de un exgrupo armado integrado en el ejército congolés desertaron de un campamento de instrucción y violaron hasta a un centenar de mujeres en un ataque contra el pueblo de Nyakiele, cerca de Fizi (al este del país) en la noche del pasado 11 de junio.
Además, los miembros de este grupo armado estuvieron ya implicados en violaciones en gran escala cometidas en esa misma zona el pasado mes de enero.
«La incapacidad de la República Democrática del Congo para llevar ante la justicia a los miembros de su propio ejército y de grupos armados responsables de delitos de derecho internacional ha fomentado una cultura de impunidad, causante de un ataque tras otro contra civiles», aseguró Erwin van der Borght, director de Amnistía Internacional para África.
Por otro lado, Amnistía subrayó que las investigaciones sobre las atrocidades cometidas en junio y agosto del año pasado, cuando más de 300 mujeres, hombres y niños fueron violados sistemáticamente en Kivu del Norte, avanzan muy despacio.
Amnistía pidió que se realicen con prontitud investigaciones exhaustivas, independientes a imparciales sobre estos delitos, conforme a las normas internacionales, y que, si hay indicios suficientes, se procese a los presuntos responsables sin aplicar la pena de muerte.
Además, instó al Gobierno a tomar medidas efectivas para garantizar de inmediato la protección de las víctimas y los testigos durante estas investigaciones y después de ellas, así como prestar ayuda médica y terapia postraumática a las víctimas sin demora.
