Siete activistas españoles de la iniciativa «Rumbo a Gaza» permanecen en la Embajada en Atenas en protesta por la inmovilización de su barco «Gernika» por las autoridades griegas. Según aseguran, mantendrán esta ocupación hasta que se permita al buque navegar libremente por el Mediterráneo.
Fuentes oficiales de la campaña desmintieron a Servimedia ciertas informaciones publicadas que apuntaban a una pronta resolución del incidente por la vía del acuerdo, con la que los activistas tratarían de proteger la integridad del barco, que permanece bajo vigilancia en el puerto de Kolinvary, en la isla de Creta.
En una nota de prensa, «Rumbo a Gaza» reiteró que la orden de inmovilización del buque «vulnera el Derecho Comunitario, la propia legislación griega y el Acuerdo de Schengen, ya que no se permite a personas de la Unión Europea circular libremente por los Estados signatarios del tratado».
Por ello, añadió, «la ocupación de la Embajada tiene como objetivo obligar al Gobierno de España a que presione al Ejecutivo de Grecia para que revoque la orden ilegal y permita la libertad de movimientos del �Gernika� y del grupo personas de ciudadanía española que componen la expedición de Rumbo a Gaza».
Aunque más de la mitad de los 21 activistas que llegaron a ocupar la Embajada regresarán hoy a España, sus compañeros lo justifican alegando que «han cumplido sobradamente con el objetivo inicial que se marcó ‘Rumbo a Gaza’: poner en el primer plano de la agenda internacional el criminal cerco israelí a la Franja de Gaza y el sometimiento de todo el pueblo palestino».
«Vuelven para reincorporarse a sus trabajos y a sus vidas y para seguir luchando cotidianamente como han hecho hasta ahora», insisten. Por lo que respecta a los que permanecen a la espera de que pueda partir la llamada Flotilla de la Libertad en la que participa en «Gernika», reconocen que puede demorarse, pero aseguran: «No nos importa. Del pueblo palestino hemos aprendido a ser pacientes».
