Las ministras de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Trinidad Jiménez, y de Defensa, Carme Chacón, y sus respectivos equipos, se reunieron este lunes para evaluar la situación en Libia. Ambas coincidieron en que es necesario que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas adopte lo antes posible una nueva resolución que tenga en cuenta la situación actual.
Según un comunicado tras la reunión, el presidente del Gobierno está en permanente contacto con ambas ministras para el seguimiento de la crisis, con objeto de decidir las actuaciones oportunas.
A la reunión asistieron el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, Juan Antonio Yáñez-Barnuevo; el director general del Magreb y Oriente Próximo, Juan González-Barba; el jefe del Estado Mayor de la Defensa, José Julio Rodríguez; y el secretario general de Política de Defensa, Luis Cuesta.
EXIGENCIA A GADAFI
«Para evitar más derramamiento de sangre, el Gobierno español exige a Muamar el Gadafi que deponga su resistencia, abandone el poder y dé paso a una nueva Libia».
Asimismo, el Gobierno español felicita al pueblo libio porque el fin del régimen de Gadafi augura un futuro mejor para todos. El Gobierno pide al Consejo Nacional de Transición que el futuro Gobierno libio tenga la máxima representatividad para construir conjuntamente un futuro compartido y que haga todos los esfuerzos para garantizar la protección de la población civil.
La iniciativa política corresponde ahora al pueblo libio. España, como el resto de la comunidad internacional, anuncia su disposición a seguir apoyándolo en su camino hacia un Estado democrático, justo y en paz.
NACIONES UNIDAS
Jiménez y Chacón han coincidido en que es necesario que el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas adopte lo antes posible una nueva resolución que tenga en cuenta la situación actual, que recoja la representatividad de las nuevas autoridades, la titularidad de los bienes congelados, el embargo marítimo y la zona de exclusión aérea.
Sobre esta resolución, la Unión Europea y la OTAN deberán adecuar sus decisiones y acelerar unos nuevos planeamientos de trabajo para asistir al pueblo libio en el proceso de transición democrática. El Gobierno español apoya una reunión de urgencia del Grupo de Contacto de Libia con la participación de las nuevas autoridades libias para conocer sus prioridades y sus proyectos inmediatos.
El Gobierno considera que la operación militar puesta en marcha a petición de Naciones Unidas, en la que España participa junto a otros aliados de la OTAN y de terceros países, está cumpliendo el objetivo principal de proteger a la población civil y de crear las condiciones para que el pueblo libio pueda decidir libremente su futuro.
El Gobierno quiere poner de manifiesto la profesionalidad y el gran trabajo realizado por las Fuerzas Armadas españolas para dar cumplimiento al mandato de Naciones Unidas, tanto en el mantenimiento de la zona de exclusión aérea como en el cumplimiento del embargo de armas a Libia.
Las unidades militares españolas que participan en la operación �Protector Unificado� de la OTAN van a continuar integradas en la misma, cumpliendo eficazmente las misiones asignadas, a la espera de las decisiones que se adopten entre todos los aliados, concluye el comunicado.
