Según los familiares, Miguel estaba de vacaciones desde el martes acompañando a su cuñado, que había ido a Chile para coger muestras de plantas
Se han cumplido los peores pronósticos. El joven catalán Miguel Marín, de 29 años y vecino de Alella (Barcelona), se encuentra entre las 723 víctimas mortales del terremoto que ha sacudido Chile, según han informado familiares del fallecido, que han señalado que Miguel murió al golpearse la cabeza con una roca en la isla chilena de Juan Fernández, al sorprenderle uno de los tsunamis provocados por el terremoto.
PERIODISTA DE PROFESIÓN
La familia asegura que ha recibido la información del fallecimiento a través de un familiar que viajaba con el joven, con el que han podido contactar a través de Internet. Según las mismas fuentes, la embajada española en Chile todavía no ha confirmado oficialmente la muerte de Miguel Marín, periodista de carrera aunque ahora trabajaba en un centro comercial del municipio barcelonés de Mataró.
Según los familiares, Miguel estaba de vacaciones desde el martes acompañando a su cuñado, que había ido a Chile para coger muestras de plantas.
El joven se vio sorprendido por: «una ola de 15-16 metros que lo arrastró todo», según han relatado los familiares, y cuando el oleaje lo devolvió a la playa su cuñado fue a socorrerle, estuvo a punto de cogerle por el puño pero Miguel ya no respondía y volvió a ser arrastrado por las olas. Los equipos de rescate lo encontraron al día siguiente. La familia ya ha hablado con el Consulado y ha hecho «todo lo posible» para repatriar cuanto antes el cadáver.
OTROS ESPAÑOLES
Mientras tanto, el sacerdote español Cecilio de Miguel, que trabajaba en Chile desde hace más de quince años y que se encontraba desaparecido desde que se produjo el terremoto, ha sido localizado con vida, según ha confirmado su hermano Miguel.
La familia del cordobés José Manuel Ventura, profesor de la Universidad de Concepción -epicentro del seísmo-, no ha conseguido hablar con él. María Vela Campoy también continúa desaparecida.
La embajada de España calcula que de los 35.000 españoles que están en Chile, 1.500 viven en Concepción.