El primer debate entre candidatos a la Presidencia de Brasil fue superado con distancia en audiencia por un partido de fútbol de la Copa Libertadores que obtuvo una cuota de hasta el 37 por ciento, mientras que le careo político no pasó del cinco por ciento, informó hoy el Instituto Ibope.
El primer encuentro entre Dilma Rousseff, del oficialista Partido de los Trabajadores (PT), José Serra, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), Marina Silva, del Partido Verde (PV) y Plinio de Arruda Sampaio, Partido Socialismo y Libertad (PSOL), fue celebrado la noche del jueves en el canal Bandeirantes.
A la misma hora, el canal Globo transmitía el partido en que el São Paulo y el Internacional definían al finalista brasileño de la Copa Libertadores, que a la postre fue el segundo equipo.
La prensa local afirma hoy que la coincidencia dejó muy claras cuáles son las preferencias de los brasileños cuando faltan dos meses para las presidenciales del próximo 3 de octubre y el fútbol se impuso con contundencia.
El debate alcanzó un pico de 5,5 puntos de audiencia, con una media de tres puntos, mientras que el fútbol se anotó un promedio de 36,9.
Más allá del poco interés que despertó entre los espectadores, el debate fue calificado por los diarios de «aburrido», «previsible», «tibio» y «soso».
El primer encuentro entre los principales candidatos se realizó horas después de que el Instituto Sensus divulgó una encuesta que muestra a Rousseff, candidata apoyada por el actual presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, con una ventaja de 10 puntos porcentuales en relación a Serra.
Según Sensus, Rousseff cuenta con un 41,6% de las intenciones de voto, Serra alcanza el 31,6% y Marina Silva tiene un 8,5%, mientras que Arruda Sampaio no llega al 2%.
La prensa local consideró hoy que esa encuesta influyó en el curso del debate y lo «polarizó» entre Rousseff y Serra, que fueron blanco de la mayoría de las preguntas de electores, periodistas y los otros dos candidatos.
Sin embargo, también coincide en que los «asuntos espinosos», entre los que se cita la corrupción o la inseguridad en las mayores ciudades de Brasil, fueron «evitados».
La campaña para las elecciones del 3 de octubre comenzó el 6 de julio pasado, fecha a partir de la cual los candidatos pudieron organizar mítines y otras actividades proselitistas en las calles.
A partir del próximo 17, la campaña llegará a la televisión y la radio, que por las dimensiones del país son considerados los principales medios de difusión política del país.
Antes de las elecciones del 3 de octubre, están previstos además otros tres debates en televisión, los días 12, 28 y 30 de septiembre.
Además, por vez primera, habrá un debate por internet, que ha sido anunciado por el portal UOL y el diario Folha de Sao Paulo para el día 18 de agosto.
