La UE ha comenzado a discutir «a sugerencia de España» posibles «opciones» para establecer un nuevo marco de relación con Cuba, ha revelado este jueves el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos.
Se trata de momento de un debate interno entre los Veintisiete que está teniendo lugar en el seno del Comité para América Latina (COLAT), un órgano del Consejo de la UE formado por representantes de de los Gobiernos de los Veintisiete, han precisado a Europa Press fuentes diplomáticas.
Esta discusión se ha iniciado «de acuerdo con todos los Estados miembros de la UE» con el objetivo de pensar una nueva relación con Cuba que «responda más eficazmente al futuro de los procesos de reformas políticas, económicas y sociales» en la isla, a la «protección de los derechos humanos», las «necesidades económicas del pueblo cubano y a la presencia europea en la isla», ha precisado Moratinos en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso.
Los ministros de Exteriores de la UE se reunirán el próximo 25 de octubre para revisar su política hacia la isla y ahí podrían decidir pedirle a la Comisión que presente un mandato de negociación para diseñar junto con Cuba ese nuevo marco de relación. También tendrán que decidir si eliminan, como pide La Habana, la actual Posición Común que rige la política europea hacia la isla y la condiciona a avances concretos en democracia y Derechos Humanos.
Según Moratinos, los Estados miembros «en general ven bien este paso a una relación bilateral» con Cuba aunque «algunos todavía contemplan» la «Posición Común como un elemento a mantener». No obstante, ha subrayado que él ve «una tendencia cada vez mayor a buscar una nueva relación con Cuba».
PP DEFIENDE UN DIALOGO EXIGENTE
En el turno de portavoces, el diputado del PP Gustavo de Arístegui se ha mostrado partidario del diálogo con Cuba, pero si es «firme, crítico y exigente, no complaciente».
En su opinión, en Cuba «no hay ninguna evolución política» en la isla y aunque se felicitó por la reciente liberación de 40 presos políticos, subrayó que permanecen en las cárceles más de un centenar de personas condenadas por hechos como «tener una radio de onda corta» y tratados por ello como delincuentes comunes.
Moratinos le ha contestado que el presidente cubano, Raúl Castro, se ha comprometido a liberar a «todos» los presos de conciencia, salvo aquellos condenados por actos de «terrorismo» y hayan producido por tanto «violencia o muerte».
Según el ministro, habrá que revisar algunas listas sobre presos políticos, como las que tienen Amnistía Internacional o la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional y ha instado a los diputados a que si conocen algún preso político que no se haya liberado o no vaya a serlo que se lo haga saber.
Otros portavoces como el de CiU, Jordi Xuclà, reclamó que el Congreso pueda debatir o al menos tenga conocimiento de cuál sería ese nuevo marco de relación entre la UE y Cuba, mientras que la portavoz socialista, Elena Valenciano, defendió que a un «gesto positivo» del Gobierno cubano como es la liberación de presos políticos los europeos respondan con «otro gesto positivo» eliminando la Posición Común que impulsó José María Aznar en 1996 y que La Habana rechaza al considerarla una imposición unilateral.
