El presidente de Honduras, Porfirio Lobo, dijo que ya no gestiona el regreso de su país a la Organización de Estados Americanos (OEA) y descartó viajar a República Dominicana para que el ex gobernante Manuel Zelaya regrese.
«No estamos haciendo ninguna gestión» para el reintegro a la OEA, indicó Lobo, y sobre versiones extraoficiales de que en diciembre entrante iría a traer a Zelaya advirtió: «No es cuando él quiera, es cuando yo quiera» viajar a la República Dominicana.
«Para mí la OEA es un tema que algún día se va a dar; cuando se cansen algunos (países) de pelear con Honduras y ya creen que se puede, vamos a regresar», apuntó el gobernante hondureño en declaraciones publicadas hoy por la prensa local.
La OEA suspendió a Honduras tras el golpe de Estado del 28 de junio de 2009, con el que se derrocó a Zelaya.
Lobo, que asumió el 27 de enero pasado, dedicó varios meses a gestionar la reincorporación del país a la OEA, a la que se oponen países que no reconocen a su Gobierno, como Brasil, Venezuela, Ecuador, Bolivia y Nicaragua.
«Humildemente estamos esperando que algún día lo decidan (aceptar de nuevo a Honduras); no estamos haciendo ninguna gestión para querer impulsar o presionar, no, no, no; estamos dejándolo a la discreción de ellos», expuso el mandatario hondureño.
Además, descartó ir a República Dominicana a traer a Zelaya porque, en su opinión, el ex gobernante «no quiere» volver porque rechazó su ofrecimiento de regresar.
«Yo ofrecí ir a traerlo, pero lamentablemente él descartó la invitación, de manera que yo ya cumplí», expresó Lobo.
El viaje a República Dominicana «no es cuando él quiera, es cuando yo quiera», respondió Lobo ante una pregunta sobre si iría a traer a Zelaya en diciembre, como han indicado versiones extraoficiales en las últimas semanas.
«No tengo planeado» ir al país caribeño, puntualizó Lobo, e ironizó que lo haría «tal vez en la Semana Santa, por allá un par de días».
«Yo incluso he hablado de la posibilidad de que me permitan indultar a todo mundo (Zelaya, los militares y otros involucrados en el golpe de Estado), yo no quiero pleitos de estos», subrayó.
«Pero todos sabemos que el señor Zelaya, el ex presidente Zelaya, no regresa porque no quiere, porque esos juicios que tiene no son para que vaya a la cárcel», sino «para aquellos que se defienden en libertad».
Zelaya argumenta que no regresa a Honduras, entre otras razones, porque no tiene garantías para su defensa en varios procesos incoados contra él por el Ministerio Público por supuestos actos de corrupción en su Gobierno y por los cuales tiene órdenes de captura.
Lobo enfatizó, al referirse a todos los involucrados en la crisis política, que «aquí no hay inocentes», y añadió que «ahora lo más importante es ver hacia adelante» y que no quiere que los hondureños sigan sumidos en si fue «golpe» o «no golpe».
