Un tribunal de Buenos Aires ha sentenciado este jueves a cadena perpetua al último dictador argentino, Reynaldo Bignone, por crímenes contra la humanidad cometidos contra diez opositores durante el último gobierno militar, entre 1976 y 1983.
En concreto, el Tribunal Oral Federal de San Martín ha dictado la pena máxima al reconocer la implicación de Bignone en privaciones ilegales de la libertad, torturas y desapariciones ocurridas durante su Gobierno ‘de facto’.
Bignone ya fue sentenciado el año pasado a 25 años de cárcel por este mismo tribunal por casos de secuestro y tortura durante la dictadura ocurridos en la sede militar de Campo de Mayo, un conocido centro de torturas donde se estima que estuvieron recluidas unas 5.000 personas.
Junto a Bignone, también han sido condenados a cadena perpetua el antiguo jefe policial de Escobar Luis Patti, y el ex agente de los servicios de Inteligencia militares Martín Rodríguez, igualmente por delitos de lesa humanidad. Patti, de 57 años, no estuvo presente en la sesión y ha seguido el juicio desde una ambulancia aparcada junto al edificio, debido a un infarto cerebral sufrido el año pasado.
Para el ex comisario de Escobar Juan Fernando Meneghini, también imputado en este proceso, la corte ha dictado una sentencia de seis años de prisión domiciliaria.
Estas sentencias elevan a 204 el número de personas condenadas por delitos de lesa humanidad desde que se anulasen las las leyes de impunidad, según datos de la Procuraduría General de la Nación recogidos por el diario ‘Clarín’.
A la lectura del veredicto acudieron activistas y personalidades como el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Eduardo Luis Duhalde, o la portavoz de las Abuelas de la Plaza de Mayo, Estela de Carlotto.
