Las elecciones locales de Buenos Aires sirven de ensayo general de las presidenciales de octubre
El alcalde de Buenos Aires, Mauricio Macri, líder de la conservadora Propuesta Republicana, deberá disputar una segunda vuelta con el candidato peronista Daniel Filmus, como ocurrió en 2007, según datos oficiales de las elecciones municipales celebradas hoy en la capital argentina.
Macri reunió el 46,7 por ciento de los votos, 18,5 puntos porcentuales más que Filmus, candidato del peronista Frente para la Victoria que lidera la presidenta argentina, Cristina Fernández, de acuerdo al cómputo oficial del 85,1 ciento de las mesas electorales.
En tercer lugar se situó el cineasta Fernando «Pino» Solanas, de la coalición de centroizquierda Proyecto Sur, con el 12,8 por ciento de los votos, por lo que el 31 de julio próximo habrá una segunda vuelta entre los dos primeros ya que ninguno logró el requisito de acaparar la adhesión de más de la mitad del electorado.
Los otros doce candidatos quedaron muy lejos, como resultado de una polarización electoral que tuvo como grandes perdedores a la Coalición Cívica, formada por dirigentes de centroizquierda y centroderecha (3,1% de los votos) y la socialdemócrata Unión Cívica Radical (UCR), segunda fuerza parlamentaria (2,9%).
En estos comicios votó más del 75 por ciento de los 2,48 millones de ciudadanos habilitados, nivel similar al de las últimas tres contiendas celebradas en la capital argentina, el tercer distrito electoral del país.
Los cómputos de la renovación de la mitad de la Legislatura porteña y de la elección de siete representantes por cada una de las quince comunas en las que se divide la ciudad marchaban más lentos, pero las tendencias hacen prever que la conservadora Propuesta Republicana se mantendrá como fuerza mayoritaria en Buenos Aires.
Los resultados de hoy remiten a las elecciones de junio de 2007, cuando Macri venció a Filmus en primera vuelta con una ventaja de cerca del 20 por ciento y mantuvo esa diferencia a favor en la segunda vuelta, con lo que accedió por primera vez a la Alcaldía de Buenos Aires.
«El electorado se polarizó de una manera extrema: Proyecto Sur se enfrentó a los aparatos de dos gobiernos», comentó «Pino» Solanas en referencia a la maquinaria electoralista de Macri y del peronismo de Fernández.
Al caer la noche en la capital argentina, los festejos de los seguidores de Macri a pura música se diferenciaba del ambiente proselitista del búnker de Filmus, quien una hora más tarde que su rival agradeció a «aquellos» que le permitieron salir una vez más a «defender el proyecto» del Gobierno de Fernández.
Macri repitió el tono de discurso de su triunfo electoral de 2007, cuando intentó convertirse en líder de la oposición al gobierno que por entonces estaba en manos del fallecido Néstor Kirchner (2003-2007), esposo de Fernández, quien le sucedió al ganar las presidenciales de octubre de ese año.
«Siempre dije que iba a haber segunda vuelta porque 50 más uno es un límite muy exigente y había muchos candidatos. Estamos listos para la segunda vuelta, nos sentimos muy bien con este apoyo de los vecinos de Buenos Aires», dijo el alcalde en su búnker, rodeado de cientos de seguidores.
«Yo les abro una mano a todos los dirigentes de este país para que ver de que manera podemos transformar esta realidad. No hay más lugar para los egoísmo y divisiones», sentenció.
Además pidió a «aquellos que piensan que las diferencias son irreconciliables» que «bajen el nivel de agresión», ratificó su compromiso a trabajar por «la unidad nacional» y llamó a «terminar con el fantasma del pasado» y entusiasmarse «con el futuro».
Por su parte, Filmus subrayó que los votos que reunió en estas elecciones «son los más altos de la historia» del peronista Frente para la Victoria en la capital argentina y se mostró confiado en vencer a Macri en la segunda vuelta electoral.
El senador afirmó que se someterá a la segunda vuelta «con el coraje» y «valor» con el que Kirchner asumió en 2003 «sabiendo que era la peor crisis y que era difícil recuperar un destino, la educación y salud» en el país.
«Vamos a convocar a todas las fuerzas» para lograr una ciudad «más justa», arengó Filmus, quien llamó a «construir una nueva mayoría» de los que «quieren una educación de calidad para todos, salud en los hospitales públicos y seguridad».