Más información
No hay duda alguna. La alcaldesa Carmena y los zarrapastrosos de Podemos con los que gobierna el Ayuntamiento de Madrid están siempre con los represores, sectarios, fanáticos y a ser posible antiespañoles.
En esta ocasión, no han sido sus beneficiados exterroristas etarras, furibundos independentistas catalanes, extremistas musulmanes o mangantes chavistas, sino verdugos nicaragüenses (Nicaragua: Los sicarios del sandinista Ortega matan al menos a 10 en una nueva jornada de protestas).
La edil anticapitalista Rommy Arce cedió este 19 de julio de 2018, el mismo día en que los obispos locales hacián público que son ya más de 350 los asesinados por el regimen, un espacio municipal para la celebración de un acto en favor de la revolución sandinista de Nicaragua.
Convocado en el centro cultural de Arganzuela -uno de los dos distritos que preside-, el coloquio contó con la presencia de una treintena de simpatizantes y los embajadores del «país anfitrión», Venezuela, Cuba y El Salvador.
Bajo el lema «Amor por la revolución. Paz para Nicaragua», la Plataforma de Solidaridad con Nicaragua y el Frente Sandinista aprovechó la ocasión para lanzar un alegato contra el «imperialismo yanqui» y la supuesta «gran operación de manipulación» que, a su juicio, está orquestando la «derecha golpista».
Y todo ello, en medio de un tenso clima generado por la presencia de un grupo de radicales que, en actitud intimidatoria, se encargaron de «vigilar» cualquier movimiento «anómalo».
