Dime con quién andas y te diré quién eres.
Ya sabíamos que entre las compañías de los de Podemos estaban los torturadores chavistas y los ahorcadores de homosexuales iraníes.
Y ahora vemos que incorporan a la siniestra lista a un enemigo de España, apóstol de la Leyenda Negra, homófobo y racista: Pedro Castillo, flamante presidente del Perú.
Juan Carlos Monedero, fundador de Podemos, se ha sumado babeante y esperando que le caiga dinero, a los halagos al líder peruano.
«Un campesino maestro rural, investido presidente de Perú con un discurso desde abajo, para los de abajo, amable con los débiles y firme con los poderosos. Comienza un Perú soberano. La educación pública declarada en estado de emergencia. ¡Cuánta esperanza!».
Monedero, que viajó a Lima a ver qué pillaba y soñando con repetir la jugada del medio millón de dólares que le dieron por nada los sicarios chavistas, también celebra que un «maestro indígena» como Castillo haya llegado al poder para poner en marcha, según él, políticas económicas que favorezcan a los más desfavorecidos y que, según los expertos de verdad, conducirán en breve al país a la ruina total y la algarada callejera.
Tras asistir a la investidura del nuevo presidente, el socio de Pablo Iglesias se reunió con la vicepresidenta para abordar proyectos de cooperación política y sondear si le pueden pagar ya algo.
Como es lógico, al de Podemos le importan un comino Castillo las críticas de Castillo a la herencia española y a la Conquista de América.
El ex maestro peruano es un auténtico apóstol de la leyenda negra.
«Colonialistas», «atracadores», o «explotadores» han sido algunos de los calificativos que ha dedicado a los colonizadores españoles.
Incluso en presencia de Felipe VI, nuestro rey:
«Durante cuatro milenios y medio nuestros antepasados encontraron maneras de resolver los problemas y de vivir en armonía con la naturaleza. Fue así hasta que llegaron los hombres de Castilla, que aprovechando un momento de caos y desunión consiguieron conquistar el estado».
En su discurso también llamó a destruir toda la simbología colonial del país y anunció que no gobernará desde la «Casa de Pizarro», sede de la Presidencia en Perú que debe su nombre al conquistador de Trujillo.
Pedro Castillo ha sido recibido con grandes elogios por buena parte de la izquierda española, la vicepresidenta segunda del Gobierno incluida.
«La toma de posesión de @PedroCastilloTe es una brizna de esperanza para Perú y América Latina. Es una oportunidad para la democracia la elección de un presidente que viene de abajo. ¡Muchos aciertos y suerte en esta nueva etapa!», escribía este jueves Yolanda Díaz en Twitter.
Que Castillo proceda de la izquierda y que su rival en las elecciones, Keiko Fujimori, sea considerada como neoliberal y conservadora, ha podido impulsar estos elogios.
Y eso que Castillo se ha posicionado públicamente en contra de algunos pilares de la izquierda española: el aborto, el matrimonio entre las personas del mismo sexo o la eutanasia, aprobada en España hace pocos meses a iniciativa de Podemos.
«Peor todavía que la eutanasia y el aborto es el matrimonio entre personas del mismo sexo. Primero la familia. Estas dos instituciones que son la familia y la escuela deben ir de la mano», afirmaba Castillo con rotundidad en una entrevista reciente.
Ha dejado claro que jamás permitirá que se apruebe alguna de estas medidas en Perú y se posiciona en contra de la legalización de la marihuana, que sí que apoya Podemos y que ya permiten países como México.
Otra de las propuestas que impulsa Pedro Castillo es la expulsión de Perú, en 72 horas, de todos los inmigrantes ilegales que tengan antecedentes penales.
También pretende instaurar el Servicio Militar Obligatorio.
