Entre la resistencia y el exilio

¿Qué opciones restan a la oposición ahora que el tirano Maduro se ha autoproclamado presidente y acapara todo el poder en Venezuela?

Maria Corina busca nuevas estrategias para enfrentar al régimen chavista

María Corina Machado y el dictador Maduro (VENEZUELA)
María Corina Machado y el dictador Maduro (VENEZUELA). PD

Duro y arriegado.

Entre otras razones porque plantar cara al regimen chavista se paga a menudo con la tortura o la muerte.

Una semana después de la fraudulenta juramentación de Nicolás Maduro para un tercer mandato presidencial, la oposición venezolana se encuentra en una encrucijada.

Con Edmundo González Urrutia, ganador de las elecciones del 28 de julio de 2024 en el exilio, y María Corina Machado enfrentando una creciente represión, las opciones para los opositores al régimen chavista parecen cada vez más limitadas.

María Corina, figura emblemática de la resistencia, reapareció brevemente el pasado 9 de enero de 2025 para liderar una protesta contra la investidura del chavista Maduro.

Como denunció su equipo y todos pudimos ver, fue «violentamente interceptada» y detenida durante más de una hora tras la manifestación.

Aunque fue liberada posteriormente debiudo a la fuerte presión internacional, su situación sigue siendo muy precaria.

Actualmente, María Corina se mantiene en la clandestinidad dentro de Venezuela, moviéndose constantemente para evitar ser capturada por las fuerzas de seguridad del régimen.

 Edmundo González, residente en España desde septiembre de 2024 cuando salió de Caracas para evadir una orden de captura emitida por la Fiscalía General de la República cada día parece más marginal.

Desde el exilio, González ha hecho un llamado, sin éxito alguno de momento, a las Fuerzas Armadas para que «no obedezcan las órdenes de Maduro» y garanticen su seguridad cuando regrese al país.

Las posibilidades de un retorno seguro parecen remotas en el corto plazo.

Apoyo internacional y complicidades

La comunidad internacional se encuentra dividida en su postura frente al régimen de Maduro.

Mientras que la mayoría de los países democráticos han condenado la toma de posesión y no reconocen la legitimidad del nuevo mandato, algunos gobiernos y figuras políticas continúan respaldando al chavismo.

En España, el gobierno de Pedro Sánchez ha mantenido una posición ambigua, evitando condenar al régimen venezolano.

Figuras del PSOE como el inefable ex presidente José Luis Rodríguez Zapatero y el diplomático Raúl Morodo han sido criticados por su cercanía al chavismo y sus turbias vinculaciones económicas en Venezuela.

Miembros de Podemos como Pablo IglesiasJuan Carlos MonederoIrene Montero han expresado en repetidas ocasiones su apoyo al gobierno de Maduro y sus respaldo a los torturadores chavistas.

Recientemente, Montero defendió en televisión la legitimidad del régimen, generando indignación entre la comunidad venezolana en España y la oposición.

Las Fuerzas Armadas: ¿clave para un cambio?

El papel de las Fuerzas Armadas venezolanas sigue siendo crucial en cualquier escenario de cambio político.

Sin embargo, el Alto Mando Militar continúa mostrando su lealtad a Maduro.

 Narveiz Sosa, analista político, señala que «la Fuerza Armada en Venezuela está siendo comandada por un Alto Mando Militar ideologizado que sostiene al régimen con la fuerza de las armas y no obedece al interés general de la nación».

A pesar de los llamados de la oposición, no hay indicios claros de fisuras significativas en la cúpula militar que pudieran facilitar una transición.

No obstante, algunos expertos sugieren que el descontento entre los rangos medios y bajos podría eventualmente generar presiones internas para un cambio.

Crisis económica y sanciones internacionales

La economía venezolana sigue sumida en una profunda crisis, agravada por las sanciones internacionales impuestas al régimen de Maduro.

La hiperinflación, la escasez de productos básicos y el colapso de los servicios públicos continúan afectando severamente a la población.

Las sanciones, principalmente impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea, han limitado la capacidad del gobierno venezolano para acceder a mercados financieros internacionales y han congelado activos en el extranjero.

Sin embargo, el régimen ha logrado evadir parcialmente estas restricciones mediante alianzas con países como Rusia, China e Irán.

Ante este panorama, las opciones para la oposición venezolana parecen limitarse a:

  1. Resistencia interna: Mantener la presión a través de protestas pacíficas y desobediencia civil, a pesar de los riesgos de represión.
  2. Presión internacional: Buscar un mayor apoyo de la comunidad internacional para aumentar las sanciones y el aislamiento del régimen de Maduro.
  3. Negociación: Algunos sectores proponen retomar el diálogo con el gobierno, aunque experiencias pasadas han demostrado la falta de voluntad del chavismo para hacer concesiones significativas.
  4. Rebelión: Como última opción, algunos analistas como Miguel Henrique Otero, director del diario El Nacional, sugieren que «la única salida es la rebelión», aunque advierte sobre los riesgos de un «baño de sangre».

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