Un policía expulsado del cuerpo ha secuestrado en Manila un autobús con pasajeros, entre los que hay unos 25 extranjeros y varios niños, para exigir que sea readmitido, han indicado fuentes policiales.
El secuestrador, que está armado con un rifle ametrallador M-16, tomó el control del vehículo a las 9 de la mañana hora local (01.00 GMT) y mantiene negociaciones con las autoridades.
La Policía identificó al sospechoso como Rolando Mendoza, un antiguo inspector expulsado del cuerpo en el 2008, después de ser acusado de robo, extorsión, y tráfico de drogas.
«Estamos tratando de determinar las circunstancias del secuestro y lo que ha ocurrido», ha explicado el jefe de la Policía de Manila, Leocadio Santiago, a la radio DZBB.
Una fuente policial indicó que los pasajeros son de nacionalidad surcoreana, mientras que otra dice que son chinos.
En el interior del vehículo, perteneciente a la agencia Hong Tai Travel, también están varios filipinos, además del conductor.
El autocar ha sido rodeado cerca del parque de Rizal, uno de los lugares más visitados de la capital filipina, y comandos policiales fuertemente armados han sido desplegados en las cercanías, ha dicho el portavoz de la Policía Nacional, Agrimero Cruz.
«Continuamos negociando con el secuestrador», ha añadido portavoz a los periodistas.
En septiembre del 2007 ocurrió un hecho similar, en el que un persona, que finalmente fue detenida, secuestró en Manila un autobús con una treintena de niños que se dirigían al colegio.
