TOKIO, 16 (Reuters/EP)
El emperador de Japón, Akihito, se ha mostrado «profundamente preocupado» por la situación que vive su país a causa del terremoto del pasado 11 de marzo y aseguró que esta crisis era imprevisible y «no tiene precedentes a esta escala».
Estas han sido las primeras declaraciones del emperador desde el terremoto y el posterior tsunami. Es muy poco frecuente que el monarca se pronuncie públicamente sobre cualquier asunto.