SFAX, Túnez, 16 (Reuters/EP)
El personal de Médicos Sin Fronteras (MSF) desplazado en la ciudad libia de Misrata ha afirmado que está «abrumado por el número de bajas» provocadas por los combates en el país a causa de problemas de capacidad en los centros médicos.
«Se produjeron 30 ingresos de heridos el viernes y con el fin de cuidar de ellos han tenido que dar el alta a algunos pacientes antes de lo que hubieran deseado para tener espacio para los nuevos heridos», ha señalado el médico Morten Rostrup.
Rostrup hizo las declaraciones desde un barco de ayuda que partió de Misrata con destino a Túnez para llevar a 65 heridos a causa de los combates entre los rebeldes y las fuerzas del líder libio, Muamar Gadafi. El barco consiguió salir del puerto el viernes después de tener que suspender su salida el jueves a causa de los intensos bombardeos.
«Los médicos lo están haciendo muy bien. Tienen algo de material, pero necesitan un neurocirujano, lo que es un problema», ha señalado Rostrup. Los rebeldes que defienden Misrata, su enclave más importante en la zona occidental del país, han indicado que la situación está empeorando cada día.
Estas mismas fuentes han asegurado que un ataque con misiles por parte de las fuerzas gubernamentales el jueves causó la muerte de 23 civiles en un distrito residencial y que los bombardeos han provocado el cierre del puerto.
«Estamos continuamente estabilizando pacientes, proporcionándoles fluidos y antibióticos», ha agregado Rostrup. «Estoy contento de que mis pacientes estén estables, deseo que continúen así», ha apostillado.
