La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, ha criticado el «deplorable historial de Derechos Humanos» en China, así como la respuesta del gigante asiático a las revueltas árabes.
Estas fueron sus declaraciones una vez finalizado el Tercer Diálogo Estratégico y Económico entre ambos países, celebrado en Washington. «Están preocupados e intentan detener la historia, lo cual es un objetivo imposible. No pueden hacerlo, pero van a esperar el máximo tiempo posible», ha dicho en una entrevista concedida a la revista ‘The Atlantic’ respecto a la reacción de Pekín a las revueltas en países árabes y su posible contagio a China.
Clinton fue más allá al vaticinar el colapso del sistema político chino, basado en un único partido. Pese a estas críticas, en testimonios anteriores Clinton ha puesto en valor los logros de las últimas conversaciones bilaterales.
«Creo que estamos alcanzando un mejor entendimiento y estimo que este es uno de los principales propósitos de estos diálogos», comentó horas antes, cuando igualmente apostó por que Washington y Pekín sean «honestos sobre sus diferencias». La secretaria de Estado asegura que abordó con su par chino, Dai Bingguo, su preocupación por la oleada de detenciones de disidentes.