OSH (KIRGUISTAN), 10 (Reuters/EP)
La presidenta de Kirguistán, Roza Otunbayeba, indicó este viernes que fuerzas indeterminadas podrían estar buscando un pretexto para reanudar los enfrenamientos étnicos entre kirguises y uzbecos tras los gravísimos incidentes que se cobraron la vida de más de 400 personas en cuatro días de enfrentamientos que comenzaron hace exactamente un año.
«Hoy existen fuerzas que siguen dispuestas a obtener capital político a expensas de la tristeza, la sangre y las lágrimas derramadas por los inocentes, para emplear esta tragedia nacional como un medio en su lucha por el poder», declaró la presidenta.
«Todavía siguen activos aquellos que buscan un pretexto y el momento oportuno para encender de nuevo la mecha de nuevas y sangrientas protestas, y dividir así el país», añadió ante el monumento de conmemoración de las víctimas que se encuentra en la ciudad de Osh, uno de los epicentros de los enfrentamientos.
«Esperamos que no volvamos a padecer lo que tuvo lugar aquí», declaró uno de los asistentes a la ceremonia, el uzbeco de 71 años Uzbek Abdurakhmat. «La última vez, la comunidad internacional no reaccionó, pero esperamos que si algo similar ocurre de nuevo, nos presten atención y manden tropas», añadió.
Por su parte, el joven Elaman Myrzabek Uulu, de 17 años de edad, kirguís y miembro de seguridad de las patrullas ciudadanas que contribuyen a poner orden en la ciudad, expresó su preocupación por la falta de uzbecos en estos cuerpos civiles de seguridad. «Nuestras relaciones deberían mejorar. No nos hemos vuelto más amigos después de lo del año pasado. Los uzbecos no se abren al exterior, no confían en nosotros», lamentó.
