HELSINKI, 17 (Reuters/EP)
El nuevo Gobierno de coalición finlandés estará conformado por un total de seis partidos políticos tras casi dos meses de negociaciones, según ha confirmado este viernes el primer ministro, Jirki Katainen, y abogará por una política económica de austeridad y una actitud europeísta.
La formación que él lidera, el Partido de Coalición Nacional (KOK), ocupará, entre otras, la cartera de Economía, mientras que el Partido Socialdemócrata (SPD), su principal socio en la coalición, tendrá los ministerios de Asuntos Exteriores y Finanzas. De esta manera, en principio, los recortes en el gasto público y la subida de los impuestos, que fueron anunciados por Katainen durante las negociaciones para formar el nuevo Gobierno, serán finalmente emprendidos.
Asimismo, el primer ministro ataja cualquier especulación sobre el bloqueo a la entrada de más miembros a la Unión Europea o a la aprobación de nuevos fondos de rescate para las economías europeas más perjudicadas por la crisis.
El nuevo Ejecutivo contará con el apoyo de Alianza Izquierdista, Los Verdes, el Partido Popular Sueco y el Partido Cristiano Demócrata, además del SPD. Katainen ha insistido durante este mes de junio que su intención era formar una coalición de Gobierno que no contara con la presencia del partido nacionalista y euroescéptico de los Verdaderos Finlandeses (VF), uno de los vencedores morales de las pasadas elecciones parlamentarias en Finlandia y causante de un terremoto político en el seno de la UE el mes pasado.
Una de las bazas electorales del VF fue su rechazo rotundo a ayudar a Portugal en un rescate financiero o una ampliación de los fondos, ya que, en ambos casos, el Parlamento finlandés debe aprobar dichas medidas.
Al respecto, el líder del SPD, Jutta Urpilainen, ha reclamado este viernes a la UE que garantice que no habrá más rescates financieros en la eurozona. Si bien los ministros que formarán parte del Ejecutivo, en palabras de Katainen, no serán euroescépticos, la actitud del SPD respecto a la UE y el euro ha sido bastante reticente. A ello obedecen estas declaraciones de Urpilainen, que señala hacia una política «más estricta» ante futuros rescates.
