Al menos tres personas, entre ellas un policía, han muerto como consecuencia de una explosión que se ha producido este domingo en el centro de la ciudad china de Kashgar, en la Región Autónoma Uigur de Xinjiang, según ha informado la Policía.
Otras tres personas han resultado heridas y dos sospechosos han sido arrestados, según la Policía, citada por la agencia de noticias Xinhua. Bomberos, policías y ambulancias se dirigen al lugar de los hechos.
Previamente, las autoridades locales habían dicho que dos hombres armados con cuchillos atacaron al conductor de un camión y luego a un grupo de personas el sábado en Kashgar después de que se produjeran dos explosiones, una en una furgoneta y otra en un mercado de comida.
Ocho personas murieron, incluido uno de los agresores, y 28 tuvieron que ser hospitalizadas. Estos secuestraron el camión tras apuñalar hasta la muerte al conductor y atropellaron a varios peatones que había en la zona. Posteriormente, bajaron del vehículo y acuchillaron a varias personas.
En Xinjiang viven muchas personas de la comunidad uigur, musulmanes que hablan lenguas túrquicas y que se oponen a la presencia de los chinos de la comunidad han –mayoritarios en China– que han ocupado la provincia gracias a la política de asentamientos promovida por el Gobierno. A causa de ello, muchos se han organizado para pedir la independencia.
Xinjiang tiene un importante valor geoestratégico ya que comparte fronteras con Pakistán, Tayikistán, Kirgizistán y Kazajistán, además que contar con grandes reservas de petróleo, gas y carbón.
Xinjiang ha vivido varios casos de ataques terroristas, según los ha definido el Gobierno chino, en las últimas fechas. El pasado 18 de julio la Policía acabó con la vida de catorce manifestantes que atacaron una comisaría de Policía y que mataron a dos agentes y dos rehenes.
LEY MARCIAL EN KASHGAR
El Congreso Mundial Uigur, un grupo de exiliados con sede en Alemania, ha señalado que las autoridades han impuesto la ley marcial en Kashgar y que al menos cien uigures han sido arrestados.
«No se puede protestar pacíficamente debido a la represión que ejerce China allí y la calculada política de asentamientos», ha denunciado el portavoz Dilxat Raxit en un comunicado enviado a la agencia Reuters.
