El país que más se ha acercado a dar información acerca de la salud del líder norcoreano es Corea del Sur.
A pesar que desde Japón se llegó a hablar incluso de la muerte del dictador, esa versión quedó totalmente descartada cuando se conoció el pasado sábado de la aparición de Kim Jong-un un día antes en una fábrica.
En este sentido, ahora ha surgido nueva información que ha desvelado que el gobernante no se sometió a ninguna cirugía, y tampoco se realizó ningún procedimiento médico.
Así lo informó un funcionario surcoreano este domingo, dejando atrás las especulaciones sobre la salud del gobernante, aunque algunas de ellas insisten en darlo por muerto a pesar de su reaparición luego de unos 20 días.
Pyongyang informó que Kim asistió a la finalización de una fábrica de fertilizantes cerca de Pyongyang el viernes, y mostró un video donde se ve al líder de Corea del Norte sonriente, moviéndose sin ninguna ayuda, a menos en apariencia, mientras cortaba la cinta inaugural o visitaba las instalaciones y fumando, todo esto para sofocar los intensos rumores de que podría estar gravemente enfermo o incluso muerto.
Un funcionario presidencial surcoreano, según reportó la agencia oficial Yonhap, dio por tierra uno de las hipótesis más extendidas sobre el dictador norcoreano: según datos de Corea del Sur, Kim Jong-un no fue operado del corazón como habían difundido medios japoneses.
No se trataba de la primera desaparición de Kim de la vista pública durante un período prolongado. En 2014, cuando reapareció después de una ausencia de seis semanas, caminó con un bastón y usó un carrito eléctrico. Las imágenes proporcionadas por Corea del Norte el sábado mostraron a Kim montando un carro eléctrico similar al que usó en 2014, cuando se informó que tenía una lesión en el tobillo.
Kim, de 36 años, es la tercera generación de su familia que gobierna Corea del Norte con un puño de hierro. No ha ungido públicamente a su sucesor, y los rumores sobre su salud provocaron preocupaciones sobre la estabilidad política en el país y su programa nuclear.
Tras la reaparición del líder norcoreano, este domingo se conoció que Corea del Sur y Corea del Norte intercambiaron disparos en la frontera, lo que se convirtió en un nuevo momento de tensión entre los dos países.
Sin embargo, el secretario de Estados Unidos, Mike Pompeo, le quitó hierro al asunto al decir que piensa que los sucesos ocurrieron «por accidente».
