El gobierno chino señaló este este martes que todavía espera una solución diplomática al conflicto nuclear iraní y que las sanciones no resolverán el problema, apenas unas horas después de que la Casa Blanca asegurara que Pekín apoyaba las sanciones.
«China siempre ha creído que el diálogo y la negociación son la mejor forma de solucionar el conflicto. Las presiones y las sanciones no pueden resolver el problema de base», señaló la portavoz de turno del Ministerio de Asuntos Exteriores, Jiang Yu.
El director para Asia del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jeff Bader, aseguró ayer que el presidente de EEUU, Barack Obama, y el de China, Hu Jintao, acordaron tras su reunión de una hora y media cooperar en la resolución de la ONU sobre nuevas sanciones contra el programa nuclear de Irán.
Según esta fuente, los dos líderes acordaron intensificar la presión sobre el régimen iraní y Pekín colaboraría con Washington.
Sin embargo, el portavoz que acompaña a la delegación de Hu en EEUU, Ma Zhaoxu, expresó tras la reunión: «China y EEUU comparten el mismo objetivo general», pero Pekín «espera que continúen sus esfuerzos diplomáticos y busquen medios eficaces para resolver» el conflicto «mediante el diálogo y la negociación».
La ambigüedad entre ambas declaraciones se explicaría por la preocupación de Pekín de perder un 12 por ciento de sus importaciones de petróleo, procedentes de Irán, y que el presidente Obama se encargó de garantizar en caso de que Teherán decida tomar represalias contra Pekín por las sanciones, según la prensa de EEUU.
La portavoz Jiang agregó, sin acabar de definir la postura de su gobierno, que su país «cree que las acciones del Consejo de Seguridad de la ONU deberían ayudar a revertir la situación y a solucionar de forma apropiada el conflicto a través del diálogo».
Jiang declinó pronunciarse acerca de si el ejecutivo de Obama había realizado unas declaraciones inoportunas sobre la postura de Pekín ante la crisis iraní y se limitó a reiterar que su gobierno seguirá participando en el diálogo para buscar una solución diplomática en Irán y que «escuchará las opiniones de otras partes».
«Estamos preparados para cooperar con otros», y para tal fin «apoyamos el camino apropiado y esperamos que las acciones del Consejo de Seguridad ayuden a resolver este problema mediante el diálogo y las negociaciones», afirmó Jiang.
En los últimos meses, Pekín se había mostrado reticente a imponer nuevas sanciones al régimen de Mahmud Ahmadineyad, pero su participación en las conversaciones de Nueva York han sido interpretadas como una victoria diplomática para Washington.
En cuanto a la reunión entre Hu y Obama, la portavoz china señaló que el presidente Hu ofreció un plan a su homólogo estadounidense para promover las relaciones bilaterales que incluye un respeto mutuo, y profundizar en la cooperación y la comunicación.
