El secretario de Defensa de EE.UU., Robert Gates, anunció hoy un plan de ahorro que incluye un recorte del 10 por ciento en la contratación del personal externo y la eliminación del Comando de Fuerzas Conjuntas (JFCOM).
Gates dijo en una rueda de prensa que estos recortes son necesarios para que las Fuerzas Armadas dispongan del presupuesto necesario después de varios años de guerra.
«La tarea que tenemos ante nosotros no es reducir el presupuesto de primera línea del Departamento sino de reducir considerablemente los gastos generales y los excesos y utilizar el dinero ahorrado en reforzar las estructuras y modernizar» el Departamento.
El presupuesto actual de Defensa, excluyendo el coste de las dos guerras abiertas, es de 535.000 millones de dólares, y la administración ha solicitado al Congreso para el año fiscal 2011, que comienza en octubre, 549.000 millones de dólares.
En la estrategia para minimizar gastos, el Pentágono prevé reducir los contratos de empresas externas un 10 por ciento anualmente durante los próximos tres años.
El secretario de Defensa ya había hecho un llamamiento a principios de año para conseguir un objetivo de ahorro de 100.000 millones de dólares en los próximos cinco años.
Uno de los recortes más llamativos ha sido la propuesta para eliminar el Comando de Fuerzas Conjuntas (JFCOM, por sus siglas en inglés), uno de los diez comandos de combate de las Fuerzas Armadas estadounidenses, que coordina las operaciones conjuntas.
El JFCOM se encarga además de que el equipamiento funcione y busca posibles lagunas en la capacitación que pueden ser solucionadas con un entrenamiento especial conjunto.
Gates no especificó cuánto dinero espera que se ahorren pero según apuntaron algunos medios estadounidenses este recorte podría suponer 200 millones de dólares.
El general de la Marina, James Mattis, ha estado al frente del JFCOM hasta que el mes pasado fue designado para reemplazar al general del Ejército David Petraeus como jefe del Comando Central.
El general Ray Odierno, que ha sido el comandante de la guerra en Irak fue nombrado para sustituir a Mattis y su labor estos meses será «la eliminación de su propio departamento», indicaron fuentes oficiales.
«He hablado con Odierno y apoya la decisión», aseguró Gates, quien señaló que tardarán aproximadamente un año en disolver el Comando ya que cuenta con más de 6.000 empleados entre civiles, militares y subcontratados.
Gates señaló que las medidas que están tomando favorecerán la lucha de EE.UU. en las guerras que enfrenta ahora y ayudará a preparar las guerras que tenga que afrontar en el futuro.
Defensa también eliminará la Agencia de Transformación de Negocios, con un presupuesto de 340 millones de dólares y 360 empleados, cuyas responsabilidades serán transferidas a otras oficinas.
