El presidente afirma que él ha visto las fotos y que no tiene ninguna duda de que se trata del cadáver de Bin Laden
La Casa Blanca ha anunciado que no serán publicadas las fotos del cadáver de Osama bin Laden porque no las considera necesarias para probar la veracidad de su muerte.
Puntualizan desde el equipo de Obama que esas imágenes «serían un simple estímulo morboso que causaría más irritación que beneficio» y, en última instancia, representaría un peligro para la seguridad nacional.
Se trata de una decisión personal de Barack Obama con la que asume el riesgo de dar pábulo a teorías conspirativas, pero con la que demuestra también una gran fe en su propio instinto y en la confianza que la opinión pública de Estados Unidos tiene en estos momentos en su gestión.
«No vamos a utilizar ese material como un trofeo, no se trata de algo que haya que celebrar como si hubiéramos metido un gol; no somos así».
Obama ha hecho estas declaraciones al programa 60 Minutes de la cadena CBS que será emitido el domingo y del que este 4 de abril de 2011 se anticiparon fragmentos.
En esa entrevista, el presidente afirma que él ha visto las fotos y que no tiene ninguna duda de que se trata del cadáver de Bin Laden, pero añade:
«Son una serie de imágenes muy gráficas que no queremos que instiguen la violencia o sean usadas como propaganda».
En cualquier caso, ya circulan por la RED y aparecen publicadas en todos los medios de comunicación del mundo imágenes de otros terroristas abatidos por los SEALS norteamericanos durante la operación ‘Gerónimo‘, el polémico nombre con que se identificó la caza y muerte del jefe de Al Qaeda.
Son unas fotografías tomadas alrededor de una hora después del asalto en Abbottabad. Muestran a tres hombres muertos en charcos de sangre, pero sin armas.
Las fotografías, tomadas por un responsable paquistaní de seguridad que entró en la vivienda tras la operación en la madrugada del 2 de mayo de 2011, muestran a dos hombres con la vestimenta tradicional paquistaní y uno con una camiseta, con sangre saliendo de sus oídos, narices y bocas.
El oficial, que quiso mantener su anonimato, las vendió a Reuters.
Ninguno de ellos parece Bin Laden. De acuerdo con la hora que aparece en ellas, la primera se tomo el 2 de mayo a las 2:30 de la madrugada, alrededor de una hora después de que acabara la operación en la que murió Bin Laden.
Otras, tomadas entre las 5:21 a.m. y las 6:43 a.m. muestran el exterior del recinto, lleno de basuras, y los restos del helicóptero de Estados Unidos que fue abandonado tras sufrir un accidente.
Parece indudable la autenticidad de las imágenes, porque detalles parecen mostrar un helicóptero accidentado en el asalto que son iguales a los mostrando en fotografías tomadas de manera independiente el lunes. El comando estadounidense perdió un helicóptero debido a un problema mecánico y luego lo destruyó.
Además, están tomadas en una secuencia y tienen todas el mismo tamaño en píxeles, lo que muestra que no han sido manipuladas. No se aprecian armas cerca de los hombres, pero son planos cortos.