Está "decepcionado" por la decisión de la juez de no poder salir en libertad bajo fianza y dice que la batalla no ha hecho más que empezar
La juez neoyorquina Melissa Jackson ha rechazado la petición de libertad bajo fianza de un millón de dólares para Dominique Strauss-Kahn, y ha ordenado que el director del FMI siga en la cárcel, acusado de la presunta violación de una trabajadora del hotel Sofitel de Nueva York.
La juez ha evocado riesgo de fuga de DSK, detenido el sábado en el aeropuerto JFK y sin pasaporte desde que fue arrestado. La defensa pedía libertad bajo fianza de un millón de dólares y proponía que Strauss-Kahn se fuera a vivir a casa de su hija en Nueva York mientras durase el proceso judicial.
DSK fue arrestado el sábado cuando se encontraba ya sentado en un avión rumbo a París, tras la denuncia de una mujer que lo acusa de agresión sexual.
El político francés estuvo implicado en un asunto similar «en al menos otra ocasión», ha declarado la acusación este lunes frente al tribunal donde comparece el director del FMI. «Tenemos informaciones según las cuales el acusado se ha comportado de forma similar en al menos una ocasión», ha declarado el fiscal frente al tribunal.
LA BATALLA HA COMENZADO
Por su parte, la defensa de DSK ha señalado que el acusado «no huyó del hotel Sofitel», donde presumiblemente ocurrieron los hechos.
«Fue a una comida con un testigo que podrá confirmarlo».
«Si se fue rápido es porque había quedado para comer y así lo testificará esa persona».
Según el abogado de la defensa, Benjamin Brafman, el vuelo en el que tenía previsto viajar DSK había sido reservado con mucha antelación.
«No es que intentara huir a toda prisa de la escena del crimen».
Brafman ha añadido que su cliente niega las acusaciones, que está «decepcionado» por la decisión de la juez de no poder salir en libertad bajo fianza y que «la batalla no ha hecho más que empezar».
La próxima audiencia del caso está prevista para este viernes, 20 de mayo.
SU CONDICIÓN DE JUDIO
Es el gran tema en Francia, dond elo ocurrido en Nueva York ha caído como un bombazo y altera hasta la contienda política. Medios como Libération se apresuran a publicar jugosas revelaciones. ¿La más llamativa del día?
Una frase que el mismísimo director del FMI y posible candidato socialista a las presidenciales galas (veremos qué pasa después de todo este asunto) pronunció el 28 de abril en un restaurante parisino, durante una comida con periodistas del diario.
«Sí, me gustan las mujeres. ¿Y qué?», dijo DSK respondiendo a la pregunta sobre las dificultades a las que debía enfrentarse como posible candidato a la presidencia.
Sus grandes handicaps en la campaña serían, por este orden y según sus palabras:
«El dinero, las mujeres y mi condición de judío».
Y continuó:
«Sí, me gustan las mujeres. ¿Y qué? Después de años hablando de fotos de multitudinarias orgías, yo no he visto ni una. Entonces… ¡que las publiquen si las tienen!».