El susto no se lo quita nadie a Verónica Rodríguez, una vecina de 50 años de la ciudad de College Station, en el estado de Texas EEUU. Y es que la buena mujer, al ir hacer sus necesidades, se topó de buenas primeras con una enorme serpiente pitón que estaba enroscada en la taza del indoro, aunque pudo reacionar a tiempo y salir pitando como alma que lleva el diablo.
El reptil, de 3,6 metros de longitud y oriundo de África, se había colado al parecer en la vivienda a través de la puerta trasera que la dueña dejó abierta mientras hacía sus tareas, tal y como da cuenta ‘The Eagle‘.
«Escuché unos ruidos en el baño, pero cuado entré no vi nada. Más tarde, al entrar a hacer mis cosas, la vi enroscada. Me pegué un susto de muerte».
Tras llamar al 911 un oficial se presentó con una bolsa de plástico, y consiguió sorprendentemente meterla en ella sin apenas dificultades.