Al policía de tan solo 24 años lo mataron de 5 diparos en la cabeza en Arizona, EEUU.
El loco de turno se sacó de repente una pistola del bolsillo y le descerrajó los tiros a sangre fría, para suicidarse después usando el arma reglamentaria del agente. Se había quedado sin balas. La terrible escena quedó registrada en la cámara que llevaba en su uniforme.
El asesino, a la izquierda de la foto.
LOS HECHOS
Tyler Stewart llegó a la casa de Robert W. Smith, de 28 años, tras una denuncia por violencia de género que había formulado un vecino que escuchó gritos.
Le abrió la puerta un hombre no identificado y detrás de él apareció el mentado.
El oficial le preguntó entonces si podían hablar fuera sobre lo que había ocurrido, y el aludido le dijo que sí, pero antes de salir fue a buscar algo a una habitación.
Como volvió con las manos en los bolsillos, Stewart le preguntó si estaba portando algún arma. La respuesta fue negativa. «Tengo frío», explicó.
Entonces empezaron a hablar. Durante algunos minutos, Smith parecía intranquilo. Pero tenía la mano derecha clavada en el bolsillo…
Por eso el policía sospechó y decidió registrarlo. Primero fue hacia la izquierda, que estaba libre y no ocultaba nada. Pero cuando fue hacia la derecha, el dueño de casa desenfundó un revólver calibre 22 y le disparó cinco veces en la cabeza.
Al percatarse de lo que había hecho, el homicida decidió suicidarse.