Un hombre en Canadá ha admitido en Facebook ser el culpable del asesinato de su hermana, su mujer y su hija antes de quitarse la vida.
«Durante los últimos 10 días he hecho algunas de las peores cosas que jamás hubiera imaginado», escribió Randy Janzen el jueves por la tarde.
En la confesión, el ciudadano de la Columbia Británica dice que su hija Emily, de 19 años, se había visto afectada desde la escuela primaria por migrañas, que habían llegado a ser tan fuertes que la joven se perdió dos años de universidad.
«Yo no podía ver a mi pequeña niña herida durante un segundo más».
«Cogí un arma y le disparé en la cabeza. Ahora ella es libre flotando entre las nubes en una tarde soleada, su largo pelo marrón hermoso que flotando en la brisa, un verdadero ángel».
El mensaje continúa diciendo que luego le disparó a su esposa, Laurel, porque una madre nunca debería tener que «escuchar la noticia que su bebé ha muerto».
Un par de días después, Janzen mató a su hermana Shelly «porque no quería que tuviese que vivir con esta vergüenza».
«Ahora mi familia es libre de dolor y (está) en el cielo», continúa el texto escrito por Janzen.
Las autoridades encontraron una de las víctimas en una casa en Langley (Columbia Británica), varias horas después aparecer la publicación en Facebook.
Poco después, llegaron a otra casa en la zona de Rosedale Popkum, donde Janzen presuntamente se había atrincherado.
Los vecinos escucharon disparos y luego una fuerte explosión.
«Se cree que varios miembros de una misma familia, entre ellos el sospechoso, han fallecido», explicó la sargento Stephanie Ashton, de la Policía Montada de Canadá, en una conferencia de prensa.
