100 días faltan para conocer quién será el próximo presidente de Estados Unidos.
La recta final se está viendo marcada por la pandemia del COVID-19, lo que hace que las campañas por la presidencia de los Estados Unidos sean muy distintas a las que se han visto en el pasado.
La pandemia canceló los eventos, recluyó a los candidatos y se apoderó de los medios de comunicación. Sin embargo, cómo llegan ambos candidatos al histórico encuentro electoral.
Dinero
No hay campaña sin dinero. Mucho menos en los Estados Unidos.
Desde el año pasado la batalla que Trump parecía tener ganada era la de recaudación de fondos. El actual Presidente ha generado un record de donaciones que, al no tener que invertir dinero en una primaria, pudo acomodar para utilizar en estos últimos meses.
Entre la maquinaria del partido y el equipo del Presidente han recaudado más de mil millones de dólares (1,08 mil millones para ser específicos).
Biden tuvo problemas con sus finanzas durante la primaria. Sanders, Bloomberg y hasta Buttigieg llegaron a tener más dinero acumulado que el exvicepresidente.
Pero desde la resurrección de la campaña de Biden con la victoria en Carolina del Sur, los demócratas aceitaron su maquinaria y comenzaron a recaudar dinero en todo el país.
Actualmente las arcas de la campaña de Biden cuentan con la nada despreciable suma de 633 millones de dólares, aunque aún muy por debajo del Presidente Trump.
Los números que son más favorables para el exnúmero dos de Barack Obama son los de las encuestas..
Campaña
Trump hasta hace poco insistía en querer hacer una campaña de grandes eventos, rodeado de gente.
Con las cifras de contagios de coronavirus por las nubes en casi todo el país, ese sueño parece que no va a concretarse y habrá que ver cómo se las ingenia el Presidente para acercarse a la gente.
Por el lado de Biden, hasta ahora el silencio (poquísimas apariciones en medios, escaza presencia virtual y ningún evento presencial) ha sido la estrategia que más resultado le ha dado. Difícil imaginar que pueda sostener este silencio hasta el 3 de noviembre.
Promesas
Si bien el coronavirus es el gran tema que todo lo ha cambiado, más allá de debatirse la respuesta del gobierno a la crisis sanitaria, el otro gran tema es la crisis económica devenida de la pandemia.
Algunos analistas políticos indican que en última instancia buena parte de los votos se definirán dependiendo de qué candidato logre convencer a los electores acerca de que tiene la capacidad de sacar la economía adelante.
Pero en este 2020 el tema racial también ha tomado gran relevancia. Tras el asesinato de George Floyd, y las manifestaciones en todo el país a consecuencia de esta muerte, lo racial ha vuelto a la primera plana en el país.
No es fortuito que Biden haya acotado su lista de posibles compañeras de fórmula a cuatro mujeres de la raza negra.
Tendencia
De los 44 presidentes de Estados Unidos previos a Donald Trump, 35 lograron ganar la reelección.
También es cierto que casi ninguno de ellos llegó a los últimos cien días de campaña con cerca de diez puntos por debajo de su contrincante en intención de voto.
Dentro de 100 días se llevará a cabo una elección diferente. Se espera que la mayor parte de los votantes se acerquen a las urnas de manera anticipada o voten a distancia, para evitar exponerse al coronavirus.
Esto pudiera generar una demora en el recuento de votos. Todos los votos por correo efectuados antes del 3 de noviembre deben ser aceptados, pero eso no quiere decir que todos los votos van a llegar a los centros electorales antes del 3 de noviembre.
Lo cierto es que estamos a 100 días de la jornada electoral, no necesariamente a 100 días de conocer quién estará al frente de la Casa Blanca por los próximos 4 años.