Estados Unidos vuelve a golpear a la cúpula del ISIS.
Una explosión hirió a cuatro militares estadounidenses durante una incursión que acabó con la vida de un alto dirigente del grupo Estado Islámico en Siria, informó este viernes el Mando Central del Ejército estadounidense.
“Anoche, durante una incursión asociada de helicópteros estadounidenses y de las Fuerzas Democráticas Sirias en el noreste de Siria, una explosión en el objetivo causó cuatro militares estadounidenses y un perro de trabajo heridos”, dijo el CENTCOM en un comunicado.
El líder del EI, identificado como Hamza al-Homsi, murió, mientras que los soldados estadounidenses y el perro están siendo tratados en un centro médico estadounidense en Irak, añade el comunicado.
Washington lidera una coalición internacional que lucha contra el EI y lleva a cabo incursiones y ataques periódicos contra el grupo.
Después de que los yihadistas perdieran sus últimos retazos de territorio ante las fuerzas locales lideradas por los kurdos y respaldadas por la coalición en 2019, los remanentes del IS en Siria se retiraron en su mayoría a escondites en el desierto en el este del país.
Desde entonces, han utilizado esos escondites para emboscar a las fuerzas lideradas por los kurdos y a las tropas del gobierno sirio, al tiempo que continúan organizando ataques en Irak.
En octubre de 2019, Washington anunció la muerte del líder del IS, Abu Bakr al-Baghdadi, durante una incursión de las fuerzas especiales estadounidenses en el noroeste de Siria.
Sus dos sucesores también han muerto: el primero durante una operación estadounidense en el noroeste de Siria y el segundo en una operación de antiguos rebeldes sirios en el sur del país.
