La Comisión Europea ha dicho hoy que la tasa sobre las transacciones financieras para combatir la pobreza defendida por el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y por el presidente francés, Nicolas Sarkozy, en la ONU, debería ser internacional para resultar eficaz.
«Siempre hemos dicho que una tasa sobre las transacciones financieras debería ser internacional», ha resaltado la portavoz del Ejecutivo comunitario, Pia Ahrenkilde.
En todo caso, Bruselas reconoce «la necesidad de encontrar fuentes apropiadas y eficaces para financiar nuestros objetivos de política de desarrollo» y ya está examinando «qué se puede hacer a nivel europeo sobre impuestos al sector financiero si no encontramos un acuerdo a nivel internacional», ha señalado la portavoz de Fiscalidad, Emer Traynor.
La Comisión presentará sus primeras propuestas en octubre.
Los ministros de Economía de la Unión Europea discutieron en su reunión del 8 de septiembre la creación de una tasa sobre las transacciones financieras internacionales, a imitación de la tasa Tobin, pero no lograron ningún acuerdo.
En ese encuentro, la vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, expresó su rechazo a esta iniciativa por considerar que fomentaría las deslocalizaciones y se acabaría repercutiendo en los clientes de los bancos.
«Tenemos sucesivos ejemplos de que la imposición de una medida parecida a esta en ámbitos locales o en ámbitos geográficos reducidos lo que ha motivado es, primero, una deslocalización, y en muchos casos también una traslación del importe de este impuesto hacia el consumidor final y por lo tanto un encarecimiento de los servicios financieros que podría en este momento dañar el crecimiento», dijo entonces la vicepresidenta.
