VIENA, 12 (Reuters/EP)
El primer ministro húngaro, Viktor Orban, ha afirmado que quiere hacer más complicado para los futuros gobiernos revertir las reformas económicas, para lo que propone hacer que los cambios sean posibles únicamente con la aprobación de dos tercios del Parlamento. Orban ha señalado que esto es necesario para generar estabilidad y ha asegurado que los cambios sólo se deben hacer a través del consenso.
«Voy a extender el porcentaje de los dos tercios en una sola dirección: en el de la legislación económica», ha señalado al periódico austriaco ‘Kronen Zeitung’.
«No es ningún secreto que en este sentido quiero atar las manos del siguiente Gobierno. Y no sólo del siguiente, sino de los diez siguientes», ha agregado.
Asimismo, ha señalado que la política sobre la deuda de los Gobiernos previas ha llevado a Hungría casi por el mismo camino que Grecia, y que, por ello, la medida propuesta es necesaria. El Ejecutivo húngaro que preside cuenta con los dos tercios necesarios, por lo que puede modificar cualquier ley de manera unilateral.
Preguntado sobre si la política de impuestos húngara era arriesgada, Orban ha señalado que la ruptura de lazos con el Fondo Monetario Internacional (FMI) a mediados de 2010 fue el verdadero riesgo.
Hungría recurrió al FMI y la Unión Europea para evitar un hundimiento financiero, pero se salió del Fondo tras optar con una política fiscal poco ortodoxa para intentar fomentar el crecimiento.
«Salimos del refugio para entrar en un mundo salvaje, donde se está frío y el crudo viento sopla. Pero así es la imagen de la libertad», ha señalado Orban. «Ahora depende de si los inversores de los mercados financieros están preparados para invertir su dinero en Hungría. La estabilidad y la confianza son básicos para esto. Si cometemos un error ahora, nadie va a confiar en nosotros», ha apostillado.
