El Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TUE) ha dictaminado este jueves que el grupo televisivo italiano Mediaset, propiedad del primer ministro Silvio Berlusconi, debe devolver las subvenciones de las que se beneficiaron sus clientes en 2004 y 2005 para la compra de descodificadores digitales terrestres por tratarse de ayudas públicas ilegales.
Italia concedió en 2004 una subvención de 150 euros a todo usuario que comprara o alquilara un aparato para la recepción en abierto de la televisión digital terrestre. El importe máximo se fijó en 110 millones de euros. En 2005 se renovó la medida con el mismo techo presupuestario pero recortando a 70 euros la ayuda por usuario.
Las empresas de televisión Sky Italia y Centro Europa 7 denunciaron ante Bruselas estas subvenciones porque no se aplicaban a los aparatos que permiten únicamente la recepción de las señales por vía satélite. Bruselas les dio la razón y ordenó la recuperación de las ayudas pero Mediaset interpuso un recurso ante la justicia europea.
No obstante, el Tribunal General desestimó ese recurso en junio de 2010 y confirmó que la subvención constituía una ventaja económica a favor de las emisoras terrestres, como Mediaset, porque les había permitido consolidar su posición existente en el mercado en relación con los nuevos competidores. Mediaset presentó entonces un segundo recurso ante el Tribunal de Justicia.
En su sentencia de este jueves, el TUE ratifica que «las subvenciones de que se trata incitaron a los consumidores a comprar un descodificador digital terrestre, a la vez que limitaba los costes de las emisoras de televisión digital terrestre que por ello pudieron consolidar su posición en el mercado en relación con los nuevos competidores.
Por ello concluye que «las emisoras que se beneficiaron indirectamente de las ayudas de Estado están obligadas a devolver las cantidades correspondientes a la ventaja así obtenida».
