El monstruo ha vuelto al lugar del crimen.Anders Breivik regresó este sábado 13 de agosoto de 2011 a la isla de Utoya bajo custodia policial para reconstruir la masacre de hace tres semanas en la que acabó a tiros con la vida de 69 jóvenes que asistían a una convención política socialdemócrata.
En una de las fotografías divulgadas por el diario noruego ‘VG‘, se puede ver a Breivik de pie y en posición de disparo desde la orilla de la isla.
Breivik, a quien se le puso un chaleco antibalas para protegerle de posibles intentos de asesinato, tenía los tobillos encadenados y estuvo acompañado en todo momento por agentes.
La isla lleva cerrada a los visitantes desde el ataque del pasado 22 de julio, que tuvo lugar poco después de la explosión de un coche bomba en Oslo, también perpetrada supuestamente por Breivik, que se cobró la vida de ocho personas.